En defensa de Leguina y Redondo
El título de esta tribuna, en realidad, es inapropiado porque estos dos veteranos se defienden solos mucho mejor de lo podamos hacerlo cualquiera de nosotros. Sin embargo, creo que es necesario escribirla y hacer explícito lo que pensamos muchos en el PSOE porque el problema del partido es el silencio. Pedro Sánchez intenta acabar con la libertad para opinar, criticar o apoyar algo que no sea su propia persona eliminando a los que quieren pensar por sí mismos. Si no rectifica sería una infamia y un tramo más de esa espiral de corte dictatorial.
Conocí a Redondo en el 2001. En ese tiempo, muchos compañeros estaban amenazados por ETA, Personas como Nicolás defendían nuestros principios exponiéndose a un tiro en la nuc. Joaquín ha sido el único socialista socialista que ha presidido la Comunidad. Cambió la región poniendo en marcha el Consorcio de Transportes, el ingreso madrileño de integración o dio, junto a Tierno, alas a la movida madrileña.
No les echan por una foto con Ayuso, les echan por tener opinión propia, no por no ser socialistas sino por no ser sanchistas. En su despotismo sin ilustrar, ha apartado a hombres y mujeres solventes incorporando en su lugar a mercenarios a sueldo como Iván Redondo que estando a sueldo del PP extremeño persiguió política y personalmente a Fernandez Vara.
Es necesario defender públicamente a Redondo y Leguina porque, no hacerlo es colaborar con una organización en la que el silencio y la paz interna se consiguen a través de la amenaza y del miedo a la destitución. Si Redondo y Leguina son apartados, algunos nos iremos con ellos.