La Razón (Andalucía)

Objetivo Bárcenas: reducir su condena a solo 12 años de la cárcel

El extesorero pretende convencer a la Fiscalía de que limite su investigac­ión por cohecho

- Tono Calleja - Madrid

Una condena por cohecho podría ampliar hasta seis años la estancia efectiva del extesorero en prisión

La decisión de Luis Bárcenas de señalar en el juicio de la Caja B a Mariano Rajoy como uno de los dirigentes que estaban al tanto de la financiaci­ón irregular del partido desde 1982 hasta 2009 busca que el extesorero del PP no permanezca más de 12 años en la cárcel. El Código Penal español establece en su artículo 76 que el máximo cumplimien­to efectivo de las condenas de una persona «no podrá exceder del triple del tiempo por el que se le imponga la más grave de las penas en que haya incurrido».

Y por eso, pese a que Bárcenas fue condenado en «Gürtel» a 29 años de cárcel, la Ley establece que el extesorero solo será privado de libertad 12 años, ya que el delito de mayor duración por el que fue condenado, el de blanqueo de capitales, era de cuatro años de prisión.

Además, en el juicio que comenzó el pasado lunes el extesorero del PP afronta una acusación por parte de la Fiscalía Anticorrup­ción de cinco años de cárcel, siendo el delito de mayor cuantía el de apropiació­n indebida, de tres años. De esta forma, aunque Bárcenas sea condenado a los cinco años de cárcel, y se unan a los 29 ya confirmado­s por el Tribunal Supremo, el cumplimien­to máximo efectivo, según el Código Penal, seguirá siendo de 12 años.

De hecho, tan solo unos días antes de comenzar el juicio de la Caja B el extesorero ya solicitó a la Audiencia Nacional el cómputo de su condena para poder solicitar permisos penitencia­rios a partir de febrero. Y lo ha hecho tras reclamar que se tenga en cuenta al artículo 76 del Código Penal. La Audiencia Nacional confirmó ayer miércoles que Bárcenas, en su situación actual, no estará más de los 12 años que establece el Código Penal.

Por el contrario, el principal peligro para Bárcenas en la vista oral del actual juicio de la Caja B viene de la decisión que tomó el último instructor de la causa, el magistrado José de la Mata, de incluir en el auto de transforma­ción las peticiones de cárcel de las acusacione­s populares, que incluyen muchos más delitos que los que reclama la Fiscalía, y entre los que se encuentra, entre otros, el de organizaci­ón criminal, que podría llegar hasta los seis años de prisión.

Es por ello que las defensas y el propio Bárcenas han recurrido a la denominada «doctrina Botín», que impide que las acusacione­s populares puedan incluir un delito en un juicio cuando no lo hayan hecho ni la Fiscalía ni la Abogacía del Estado. En este caso, el fiscal Antonio Romeral también ha aludido a esta doctrina jurisprude­ncial para reclamar al tribunal de la Caja B que no tenga en cuenta los delitos que no formen parte de su escrito de acusación. Es decir, ninguno que no sea apropiació­n indebida (tres años), delito fiscal (un año) y falsedad documental (un año).

¿Entonces por qué Bárcenas trata de que la Fiscalía Anticorrup­ción reconozca que el extesorero está colaborand­o con la Justicia? La respuesta está en otra pieza separada que investiga el juez Santiago Pedraz. En concreto en la de donaciones «finalistas», en la que de forma expresa Bárcenas se ofrece a colaborar en su escrito-confesión.

En esta causa, que está en plena investigac­ión, ya se señala a Bárcenas por cohecho, que está penado con hasta seis años de prisión. De resultar en un futuro condenado por este delito, el horizonte carcelario del extesorero pasaría de los 12 actuales a 18 años. Este aumento de la pena efectiva se origina tras computar el triple de la pena mayor de todas las condenas de Bárcenas, que sería ahora de seis años.

En este supuesto, la confesión de Bárcenas, en la que señala a Rajoy, buscaría convencer a Anticorrup­ción de que está colaborand­o con la Justicia. Y una confesión podría rebajar varios grados la pena del delito de cohecho, que bajaría de esos seis años. Y para evidenciar esta supuesta colaboraci­ón, Gustavo Galán ha llegado incluso a reclamar un careo con el expresiden­te del Gobierno.

Fuentes de la Fiscalía han asegurado a LA RAZÓN que solo si Bárcenas aporta nuevas pruebas podría gozar de una futura rebaja de penas para reducir su estancia en prisión. Sin embargo, el abogado del extesorero ya ha anunciado que muchos de esos documentos le fueron sustraídos a su cliente con la operación «Kitchen» orquestada por el Gobierno de Mariano Rajoy.

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EFE Luis Bárcenas durante la vista oral del juicio por la Caja B del Partido Popular

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