La Razón (Andalucía)

Reconocien­do nuestro propio liderazgo

- Javier González de Lara Presidente de la Confederac­ión de Empresario­s de Andalucía

EnEn este Día de Andalucía los recuerdos de la buena vida previa de la pandemia –los encuentros familiares, con amigos; nuestras fiestas populares y el normal desarrollo de los proyectos empresaria­les y vitales de los emprendedo­res–, quedan acaso tan lejos como lejos se adivinan en el calendario futuro. Nuestra tierra, tan pletórica en primavera, volverá por responsabi­lidad a sacrificar­se en una concatenac­ión histórica, insólita, de anulacione­s. Más lejos aún, andando el tiempo, miraremos atrás para ensalzar este esfuerzo presente y cómo logramos salir adelante en un cambio de época. Hoy, y para comenzar a labrar esa remontada, no debemos hacernos trampas a nosotros mismos. Vean conmigo si los que siguen no son ejemplos de palos propios en nuestras ruedas.

En marcha ya la vacunación frente a la Covid-19, se insiste en el propósito de un 70% de españoles vacunados para el 30 de junio. La Administra­ción ha de ser cautelosa y marcar siempre horizontes de inmunidad alcanzable­s. Con una escucha activa de los agentes sociales, planificar la prelación de sectores y profesiona­les que deben vacunarse ante el riesgo diario de contagio.

Detengámon­os en los ceses de actividad no esencial donde se supere el umbral de contagios establecid­o por cada cien mil habitantes. ¿Es coherente el cierre de los negocios sin un adelanto del toque de queda? Esta es la paradoja: conlleva la amenaza de derivar los contactos personales desde los entornos empresaria­les –comercios y espacios de actividad económica comprometi­dos con las medidas antiCovid–, al ámbito doméstico. Hay, con la mejor intención y sin buscarla, una traslación del riesgo de contagios a los entornos particular­es. Desde CEA insistimos en el aconsejabl­e adelanto del toque de queda agradecien­do, no obstante, que el Gobierno contemple la graduación de las situacione­s y la posibilida­d de distintos escenarios.

Mirar al futuro, mirar hacia Europa

Mirar al futuro, como nos invita este 28-F, implica mirar hacia Europa. Fijarnos en qué están haciendo los países vecinos; en qué balones de oxígeno nos está brindando la Unión y en qué músculo exhibimos para aprovechar­lo. En Alemania son 74 los euros de ayudas directas a los autónomos por cada 100 euros perdidos por la crisis Covid-19; en Francia, 58 euros retornados. En Italia, 44 euros por cada 100 de pérdidas. Aquí, en España, los autónomos reciben 14 euros de ayudas directas por cada centenar perdido. El envés de esta comparativ­a sangrante podrían ser los fondos europeos, sobre cuyo esperado efecto terapéutic­o ya he escrito antes en LA RAZÓN Andalucía, siempre atenta al sentir de los empresario­s andaluces. Debemos despertar a la renovación administra­tiva que estas ayudas exigen: urge una transforma­ción casi genética de la Administra­ción para que los fondos EU lleguen en los plazos en los que son necesarios. Ya. Ahora. Nos la jugamos con el modelo de gestión y los criterios de reparto. El tejido empresaria­l andaluz, nuestras pymes y autónomos, ansían este impulso. Existe la voluntad de digitaliza­r e innovar en sus negocios. La Administra­ción y la burocracia –en ocasiones, «el arte de convertir lo fácil en difícil por medio de lo inútil», dijo el mexicano Castillo Peraza– no pueden ser los peores enemigos para las ayudas de la Unión.

Tenemos una baza, envidiable a nivel mundial, que volverá a resplandec­er cuando la vacunación se generalice: nuestro Turismo, pilar de nuestra Economía,hasidoelgr­anolvidado­esteañodep­andemia. Pensemos que sólo hasta hoy. Confiemos en que una nueva sensibilid­ad emerja. Que seamos la segunda potencia mundial, sólo por detrás de Francia, por delante de Estados Unidos, debe ponernos en marcha. Es perentorio un plan de rescate del Turismo. Que es lo mismo que pedir un rescate para la fuente de la que emana el 30% de nuestro PIB. El diario británico The Telegraph recomienda que cuando cese la pandemia se visite Sevilla antes que cualquier otra capital del mundo y no pasamos de celebrar la anécdota. Cuidemos nuestras fortalezas; creámonos nuestro liderazgo.

Hemos puesto ya algunas bases para la recuperaci­ón. Y este año 2021 debiera ser el del desarrollo de llaves maestras como el Plan de Apoyo a Pymes y Autónomos suscrito en otoño con la Junta. Aún hoy, tres meses después, vivida en el país una tercera ola de la pandemia y con cifras de paro recrudecid­as, ninguna Comunidad puede presumir como Andalucía de un espaldaraz­o tan decidido a la superviven­cia de su tejido empresaria­l como el que representa­n los 667 millones de este plan. También en esto, líderes y ejemplares en la unidad empresaria­l y en la negociació­n con el Gobierno autonómico. Que ese plan no sea un trampantoj­o; desarrolle­mos hasta el último renglón y hagamos lo prometido: sumarle más ayudas directas que favorezcan la superviven­cia de nuestros empresario­s. Hagamos cierto lo declarado públicamen­te: que ese plan no sería un fin, sino el comienzo de un acompañami­ento al tejido empresaria­l como parte que es de la solución a esta crisis.

Nuevos protagonis­tas

Y en este desenlace ansiado a una crisis sin precedente­s hay actores silenciado­s. Permanecen en segundo plano, víctimas de una lacra social eclipsada por la pandemia, cuando justo están llamados a ser los protagonis­tasdelesce­nariopostC­ovid.Leshablode­nuestros jóvenes, atrapados en un tiempo de entrecrisi­s y amenazados con la cronificac­ión de la falta de oportunida­des y el paro. La tasa de desempleo entre los andalucesm­enoresde25­añosescala­yahastael5­2,2%. Inevitable­mente, les asedia la melancolía y la falta de esperanza. Urge plantearno­s qué papel jugarán en la reconstruc­ción,quécapital­humanopode­mosperder si, una vez más, no encuentran mejor opción que emigrar para desarrolla­rse; qué rol decisivo ha de desempeñar la que probableme­nte sea una de las generacion­es mejor preparadas de nuestra Historia. Porque los próximos 28-F serán escritos por ellos. Y su orgullo de pertenenci­a a nuestra tierra dependerá en parte de qué fuimos capaces de hacer por ellos y cómo demostramo­s que consideráb­amos su futuro tan importante como el nuestro.

«Nos la jugamos con el modelo de gestión» «El Plan de Apoyo no puede ser un trampantoj­o»

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain