Ayuso promete rebelarse y Gabilondo desoye a Moncloa
La presidenta mantiene que entre 2021 y 2023 bajará impuestos
El anuncio de Moncloa de que obligará a Madrid a subir los impuestos de Patrimonio, Sucesiones y Donaciones alteró ayer por completo la campaña de los dos candidatos con opciones de ocupar a partir del 4 de mayo la Presidencia regional: Isabel Díaz Ayuso y Ángel Gabilondo. La actual jefa del Ejecutivo avanzó su intención de poner todos los medios a su alcance para parar la «armonización» que pretende Pedro Sánchez. El candidato socialista, por su parte, se desmarcó de la posición fijada por la ministra Montero: «No tocaré los impuestos, yo no puedo decir otra cosa».
La presidenta Ayuso visitaba la el Salón de Arte Moderno, pero su declaración de intenciones respecto a los planes fiscales de Sánchez eclipsó todo: «Os anuncio que nos vamos a rebelar contra cualquier imposición fiscal y vamos a hacer todo lo que está en nuestra mano para no solo no subir los impuestos en Madrid, como venimos defendiendo, sino para hacer una bajada histórica en el IRPF, a lo que me he comprometido personalmente. Vamos a seguir defendiendo nuestra autonomía fiscal y nuestra política de bajos impuestos para fomentar más empleo y más recuperación».
En el entorno de la presidenta consideran «gravísimo» que el presidente anuncie estas subidas de impuestos en la Comunidad Comunidad de Madrid a las puertas de una campaña y en un contexto de grave crisis económica, especialmente por el impacto que pudiera tener al ahuyentar a la iniciativa privada y al capital. «El presidente del Gobierno está utilizando la presentación de los fondos europeos para la campaña y moviendo así sus anuncios a conveniencia, en un momento en que la economía está tan tocada y que los ciudadanos lo están pasando tan mal y, sin embargo, están viendo cómo con todos sus ahorros sí están haciendo estos anuncios electorales». Fuentes próximas a la presidenta califican de «mentira» los anuncios realizados por Sánchez e insisten en el maltrato de Moncloa con Madrid. Y ponen cifras a ese maltrato: «Nos deben 413 millones de euros: 359 del IVA del año 2017 y 54 millones de las entregas a cuenta del año 2019. También nos han discriminado en el reparto de fondos REACT. Seguimos estando infradotados en transportes, aparcaron nada más llegar al Gobierno un plan de Cercanías que el anterior Ejecutivo del Partido Popular tenía para Madrid dotado con 5.000 millones de euros. No hemos visto un solo euro. Estamos infradotados en inversiones por parte del Estado porque apenas hay para Madrid: hay ahora mismo un déficit de 1.250 millones del año 2018 sin contar lo de la Unión Europea».
En el partido rival del PP, el debate generado en torno a esta subida fiscal no ha hecho más que complicar el discurso de Gabilondo en una materia ya complicada de por sí para él. Hay que tener en cuenta, que el candidato socialista lanzó su precampaña con el compromiso de no subir ningún impuesto en los próximos dos años. La legislatura que arrancará el 5 de mayo terminará en 2023, no dudará cuatro años, y esa circunstancia y la situación de excepcionalidad económica derivada de la pandemia fueron los argumentos con los que Gabilondo trató de justificar su apuesta por no tocar ninguna figura fiscal hasta 2023. El hecho de que apenas dos meses antes del adelanto electoral, el propio Gabilondo registrase en la Asamblea de Vallecas una subida de impuestos por valor de 1.300 millones y, ahora, el anuncio del Gobierno de Pedro Sánchez han tirado por tierra esta estrategia.