El fondo de solidaridad de la nueva competición triplica al de la Champions
El nuevo torneo asegura que repartirá 400 millones con su fondo de solidaridad para fomentar el fútbol frente a los 129 que reparte la UEFA. Infantino, presidente de la FIFA, atacó a los 12 clubes y elogió a Qatar por el Mundial
«La FIFA está construida sobre los valores del deporte», dijo Infantino, contra la creación de la Superliga Y luego añadió: «Qatar ha hecho una gran implementación en los derechos humanos para el 2022»
El bombazo de la Superliga ha trastocado los planes del fútbol y hoy se sigue dando vueltas al futuro de este deporte en vez de preocuparnos por un Real Madrid sin centrocampistas en el partido de Liga contra el Cádiz. Una vez marcadas las posiciones por las dos partes, lo que queda es el enfrentamiento o el entendimiento y ahora mismo lo segundo está mucho más lejos que lo primero. La UEFA ha salido con todas las armas posibles, apoyada por algunas manifestaciones de aficionados, mientras que los clubes fundadores están dispuestos a superar este momento para convencer a los escépticos de que su plan es el único posible para adaptarse a las exigencias del mercado y a una audiencia global con miles de tentaciones y un grado de atención que ha disminuido alarmantemente por las nuevas tecnologías.
Una de las acusaciones que se hace a la nueva competición es que es insolidaria. La Superliga, contra eso, asegura que su plan pasa por multiplicar la recaudación recaudación de dinero y, por tanto, multiplicar el reparto del mismo a todos los niveles, más allá de los participantes directos en ella.
Fuentes de la competición aseguran que el plan de la nueva organización es repartir 400 millones de euros entre las federaciones mundiales para apoyar la estabilidad y el crecimiento del fútbol más joven. Según las mismas fuentes, el reparto que hace la UEFA a esos niveles apenas llega a los 130 millones a los países sin Champions
Lo de la Superliga sería una cantidad que iría subiendo según subieran los ingresos que lograra la competición y el plan es que su fondo de solidaridad reparta hasta 10.000 millones para ayudar a todo el fútbol. La teoría es que la llegada de dinero nuevo y sin pasar por la mediación de la UEFA es un alivio para todos y una fuente de ingresos no exploradaDesde la organización futbolístaca europea, que ayer celebró su congreso número 45 se ha decidido apostar por el punto de vista de la ética: «La UEFA y sus federaciones miembro creen en un modelo verdaderamente europeo que se basa en las competiciones abiertas, la solidaridad y la redistribución para garantizar la sostenibilidad y el desarrollo del juego en beneficio de todos, y la promoción de los valores europeos y los resultados sociales», aseguraba, a la vez que llamaba «conspiradores» a los que han puesto en pie la Superliga. «Es una afrenta a los valores europeos y al mérito deportivo que se arroguen el derecho de ‘separarse’ y reclamar el legado que todos construyeron», continuaba con la dureza con la que se están mostrando desde que el domingo por la noche se mandara el comunicado de creación de la nueva competición. Infantino, presidente de la FIFA, también cargó con dureza: «Dejadme ser extremadamente claro. La FIFA está construida sobre los verdaderos valores del deporte. FIFA está claramente en contra de esta Superliga. La UEFA y el fútbol europeo tienen todo mi apoyo»
Desde la Superliga se considera que ni la UEFA ni la FIFA puede no puede ir dando lecciones de moralidad y de cómo tratar el mundo del fútbol. Primero porque ellos no son los que generan los ingresos. Son los clubes, mientras que las dos organizaciones viven de eso y segundo porque ambas, dicen, tiene numerosos puntos oscuros y la opacidad suele ser su norma de actuación. Desde la Superliga no se entiende que no se hayan movido antes para buscar el máximo rendimiento de su producto, que no haya claridad en los gastos y en la distribución de todos los ingresos o las negociaciones de la televisión o que algunos casos de corrupción hayan golpeado a las puertas de ambas instituciones
Ayer, Infantino siguió cargando contra la Superliga: «Los 12 clubes son responsables de sus actos. No puedes quedarte en medio. Dicen ‘Estás con nosotros o contra nosotros’. Hay que respetar las organizaciones, las ligas, la UEFA, la FIFA, la historia... El fútbol es esperanza», decía y lueño habló del Mundial de Qatar, en cuya construcción de estadios se han vivido tragedias: «Qatar ha hecho una gran implementación en los derechos humanos. El Mundial de 2022 será el mejor de la historia».