«Si recuerdas, volvemos a ganar»
Intentó desequilibrar a Ayuso con las cifras de la pandemia
El frío saludo entre la presidenta de la Comunidad de Madrid y el ex vicepresidente del Gobierno vaticinaba todo lo que llegaría después. Confrontación directa por parte de Pablo Iglesias contra Isabel Díaz Ayuso, arrojando los datos de coronavirus como arma política para tratar de desestabilizarla y retratarla, aunque sin contestar, sin embargo a los envites de ésta cuando le recordaba su responsabilidad en la pandemia como miembro del Gobierno de España . Tuvo su primer cara a cara con la candidata de Vox Rocío Monasterio, cuando ésta le acusaba de haber vivido la pandemia desde Galapagar «viendo series». El ex vicepresidente arrojó a la presidenta de la Comunidad de Madrid los datos de coronavirus en la Comunidad como primer dardo. «La pandemia no era una desgracia sino una oportunidad para hacer caer al gobierno que llaman socialcomunista», espetó a Ayuso. Continuó con la guerra de cifras instándola a contestar sobre el número de fallecidos por Covid en la Comunidad de Madrid y por las listas de espera. La acusó de «tomar el pelo a los ciudadanos». Trató de defenderse del envite de la presidenta por «no pisar las residencias» durante su estancia en Moncloa, a lo que contestó asegurando que era su vicepresidencia la que ordenaba a la UME qué residencias desinfectar. En cuanto a propuestas, prometió «dentista y gafas gratis», medidas para incentivar el alquiler social y bajada de impuestos para los más vulnerables. A Gabilondo le pidió subir los impuestos a las rentas altas.
En cuanto a pactos, el ex vicepresidente se mostró seguro que después del 4-M habrá un gobierno de izquierdas en Madrid. Alejó la posibilidad de pactar con Cs porque asegura que no obtendrá representación. Presumió del marcaje que su partido hace al PSOE en Moncloa como garantía de que si firma un pacto de izquierdas «las firmas no se las llevará el viento». Centró su discurso en que si el elector «recuerda volveremos a ganar»
Iglesias dejó en el armario la sudadera mitinera y apostó por la americana de ex vicepresidente, como guiño a su gestión en el Gobierno como mejor apuesta para presentarse como candidato a presidente.