Irreductibles
En pleno debate político posterior a la protesta de Colón, con la polémica de Ayuso a propósito del papel del Rey en los indultos, puede ser muy oportuna la lectura de «Sin complejos», escrito por Esperanza Aguirre, todo un referente para la actual Presidenta de la Comunidad de Madrid. Se trata de una defensa razonada de sus ideas y una notable enmienda a la senda emprendida por Pablo Casado tras la destitución de Cayetana Álvarez de Toledo, que tacha de incomprensible y decepcionante. La defensa de la batalla cultural que preconiza Esperanza Aguirre y que defendía con ardor guerrero Álvarez de Toledo nos remite ineludiblemente a un libro muy polémico en el Reino Unido, «La masa enfurecida», de Douglas Murray y que probablemente se encuentre entre los libros de cabecera del húngaro Viktor Orbán; prácticamente no elude ningún tema por muy amplio que sea el consenso social al respecto y que sintetiza en sus cuatro capítulos: Homo, Mujeres, Raza y Trans. A propósito del segundo de ellos, puede resultar un magnífico complemento el interesante documental
«La píldora roja», en el que una joven directora feminista abordaba la reivindicación de hombres por sus derechos en Estados Unidos.
Tampoco se puede afirmar que siga la corriente mayoritaria el catedrático de Medicina Manuel Martínez-Sellés en «Eutanasia. Un análisis a la luz de la ciencia y la antropología», en el que no faltan las alusiones a las películas «Mar adentro», «Intocable», «Million dollar baby» y «La escafandra y la mariposa», títulos emblemáticos sobre la materia. El suicidio está presente en «Muertes por desesperación y el futuro del capitalismo», un riguroso estudio escrito por los ganadores del Nobel de Economía Anne Case y
Angus Deaton que completan con numerosas tablas y datos. Frente a éstos, el libro «#FakeYou. Fake news y desinformación» se presenta como un proyecto colectivo dirigido por Simone Levi, en el que figuran varios profesionales de reconocido prestigio en diversas disciplinas como Max Carbonell, Robert Guixaró o Gemma Palau; especialmente interesante es el apartado destinado al cine propagandístico.
Como contrapunto a estos ensayos nada mejor que adentrarse en la cultura a través de cuatro libros muy diferentes en los que cabe encontrar como nexo en común la presencia del cine. Tras el libro de memorias de Amparo Muñoz, «La vida es el precio», el escritor y periodista granadino Miguel Fernández acaba de presentar la biografía «La vida rota», en la que reconstruye sus pasos sirviéndose para ello de numerosas fuentes, lo que confiere especial valor a su trabajo. Otra sólida biografía es la escrita por Javier León Herrera en «Nunca hemos sido los guapos del barrio», su documentado libro sobre los Hombres G, coronado con las portadas de la discografía al completo de este grupo liderado por David Summers. Su padre, el rebelde Manolo Summers está presente en «La satírica transición. Revistas de humor político en España (1975-1982)», de Gerardo Vilches, un libro imprescindible para conocer el papel tan relevante que tuvieron los también irreductibles Chumy Chúmez, Forges, Ivà y El Perich en unos años cruciales de la historia de España.
Corea nos queda bastante lejos pero, gracias a Beatriz Vera Poseck, gran amante de este país, su cine está más cerca. «Cine coreano. Cine se escribe con K» es un volumen bastante completo con una estructura que permite al lector conocer la historia de Corea a través de sus películas, descubrir los cineastas más destacados, saber cuáles son las mejores películas y qué directoras brillan más así como adentrarse en la historia de su cine; ojalá se editaran más libros como éste sobre otros países y sigan dando sus frutos los autores citados.