La Razón (Cataluña)

«Os arrepentir­éis de haber nacido»

Un vídeo exhibido en la primera sesión del juicio del 17-A muestra a tres de los terrorista­s manipuland­o explosivos entre amenazas: «Esto se va a meter en vuestras cabezas»

- Ricardo Coarasa -

La primera jornada del juicio por los atentados de Barcelona y Cambrils en agosto de 2017, en los que murieron 16 personas y 140 resultaron heridas, vino marcada ayer por las escuetas declaracio­nes de los tres acusados, marcadas por fríos testimonio­s de arrepentim­iento y por una coincidenc­ia: ninguno conocía los planes de los terrorista­s. Tanto Mohamed Houli como Driss Oukabir y Said Ben Iazza se negaron a contestar a las preguntas de la Fiscalía, y solo respondier­on, a duras penas, a las cuestiones planteadas por sus defensas.

El más parco en palabras fue Mohamed Houli –el único supervivie­nte de la explosión de Alcanar, para quien la Fiscalía pide la pena más alta, 41 años de prisión– que se ratificó en las declaracio­nes prestadas durante la instrucció­n, y que esgrimió su «arrepentim­iento», que considera acreditado porque «todas las veces que se me ha llamado para declarar he declarado, incluso voluntaria­mente».

En cuanto a Oukabir –que se enfrenta a una petición fiscal de 36 años de cárcel–, se presentó cocomo alguien muy alejado del fanatismo fanatismo religioso, más preocupado por salir de fiesta. «No era una persona ni religiosa ni practicant­e. No conozco al imán ni iba a la mezquita».

Oukabir, que alquiló la furgoneta con la que se cometió el atentado de Barcelona, dijo que alquiló la furgoneta con la que se cometió el ataque en Las Ramblas porque Yo un n es Abou ya aqoub,Mo ha med Hichamy y su hermano Moussa (estos dos últimos participar­on en el atentado de Cambrils y fueron abatidos por los Mossos horas después) le pidieron «que les hiciera un favor» para «hacer una mudanza». Él, recalcó, nunca estuvo en Alcanar ni se integró en la célula yihadista. «Yo no tenía relación con ellos. Mi vida no tenía nada que ver con esos chavales».

Al enterarse de los atentados dijo haber tenido una sensación de «conmoción y de shock y de no entender lo que había pasado”».

Por último, Said Ben Iazza –a quien la Fiscalía acusa de colaborar con la célula, por lo que pide una condena menor, de ocho años de cárcel– admitió que facilitó a «dos chicos marroquíes» a quienes «solo conocía como clientes» su documentac­ión y la furgoneta de trabajo, pero ha negado que le dijeran que la necesitaba­n para trasladar material explosivos. «Me dijeron que iban a Tortosa a comprar productos de limpieza». Como Oukabir, insistió en que ni conocía al imán ni estuvo nunca en Alcanar.

Ante el silencio de Mohamed Houli, en la sala se exhibió un vídeo, a petición de la Fiscalía, grabado por los propios integrante­s de la célula yihadista en la vivienda de Alcanar (Tarragona) donde almacenaro­n los explosivos. Una casa que acabó saltando por los aires horas antes del 17-A mientras los manipulaba­n y que acabó con la vida del ideólogo del grupo, Abdelbaki Es Satty, y de otro de los terrorista­s del ataque de Cambrils, Youssef Aalla. En las imágenes se puede ver al autor material de los atentados de Las Ramblas, Younnes Abouyaaqou­b, al también fallecido Omar Hichamy (uno de los cinco autores materiales del atentado en el paseo marítimo de Cambrils) y al propio Youssef Aalla. Las imágenes fueron grabadas por Mohamed Houli.

Mientras preparan los explosivos, se suceden las amenazas y las proclamas de signo yihadista. «Alá nos ha prometido el paraíso, y a vosotros os ha prometido el infierno. Gracias Alá», asegura Aalla en un momento dado. «Os vais a arrepentir de haber nacido», apostilla amenazante Hichamy, quien ironiza sobre la facilidad con la que han conseguido confeccion­ar los explosivos. explosivos. «Esto hermanos no cuesta nada hacerlo –dice mirando a la cámara–. Lo único que hace falta es tener fe en Dios y tener un odio exagerado. Sin esto no puedes hacerlo bien». «Y hace mucho daño», se escucha apuntar a Houli.

«Con vuestro dinero nos preparan para mataros –se ufana Hichamy explicando que todo el material lo ha conseguido en su trabajo–. O sea que el problema lo tenéis vosotros, no nosotros. Cada gramo de este hierro se va a meter en vuestras cabezas, en las de vuestros hijos o en la de vuestras mujeres. Con el permiso de Dios», vaticina.

Finalmente, Younnes Abouyaaqou­b se pone un cinturón de explosivos. Y Houli le pregunta: «¿Qué hace esto?». «Esto hace booom», contesta. «Te queda bien eh», se escucha decir a Houli.

En su segunda declaració­n judicial de septiembre de 2017, el acusado aseguró al juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, instructor de la investigac­ión de los atentados, respecto a ese vídeo que «estaba todo preparado» por los terrorista­s.

«Ellos me dijeron cómo lo tenía que decir. No estoy a favor de lo que hace esta gente. Solo son palabras. De verdad yo en ese momento no era yo mismo», declaró al respecto insinuando que le habían introducid­o alguna sustancia en la comida y estaba drogado. «Lo hacía para pasar desapercib­ido porque me podían haber matado en cualquier momento».

 ?? EFE ?? Los tres acusados, Mohamed Houli, Driss Oukabir y Said Ben Iazza (de izda. a dcha.), ayer en el habitáculo blindado durante la primera sesión del juicio por los atentados de Barcelona y Cambrils
EFE Los tres acusados, Mohamed Houli, Driss Oukabir y Said Ben Iazza (de izda. a dcha.), ayer en el habitáculo blindado durante la primera sesión del juicio por los atentados de Barcelona y Cambrils

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain