CASTILLA-LA MANCHA TAMBIÉN ESTUDIA PEDIR LA ZONA CATASTRÓFICA
El Gobierno de Castilla-La Mancha estudia pedir al Ejecutivo estatal la declaración de zona catastrófica tras el paso de la borrasca Filomena. Para ello, recabará información sobre los daños entre los empresarios, sindicatos, tercer sector, ayuntamientos y diputaciones, según aseguró el consejero de Fomento, Nacho Hernando. En una rueda de prensa, Hernando explicó que, en función de los «datos objetivos» recabados, se planteará o no la posibilidad de remitir esa información al Ministerio de Interior, que es quien dictamina si es factible o no la declaración de zona catastrófica. Así lo ha respondido a las preguntas de los periodistas con relación a la petición del PP de solicitar una declaración en este sentido. «La declaración en sí no es lo importante, sino el determinar qué daños materiales se han producido para que pueda haber compensaciones a esas personas», añadió.
Desde la región se quejan de la negativa tan precipitada del Gobierno a la concesión de esta declaración y se emplazan a finalizar el estudio de los efectos adversos de Filomena para tomar una decisión. De proceder a ello, se sumaría a la Comunidad de Madrid, cuya presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ya ha asegurado que apoyará a cualquier alcalde «de cualquier municipio y de cualquier signo político» que solicite la declaración de zona catastrófica, como ya se ha abierto también a hacerlo el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida. A este pronunciamiento fue al que el ministro Fernando Grande-Marlaska no se mostró receptivo, aunque posteriormente hayan matizado la vehemencia de su negativa.