El sueño de la unidad
En su discurso de investidura, Biden se fijó como reto prioritario unir a los norteamericanos, ¿es factible?
La unidad nacional es una prioridad absoluta pero difícil de lograr. Es clave que Biden se acerque a los partidarios de Trump con respeto, en lugar de tratar de demonizarlos. El tipo de gente sin ley que irrumpió en el Capitolio es irreconciliable, pero son una pequeña franja de la nación. El 47% de los estadounidenses votaron por Trump y la mayoría de ellos no son extremistas irracionales. Si Biden se centra en prioridades nacionales compartidas como acelerar las vacunas e impulsar la economía, algunos de esos partidarios del ex presidente pueden ganarse. Si se centra en la política de identidad impulsada por el ala izquierda del Partido Demócrata, perpetuará las divisiones sociales y políticas.
¿Se puede ser optimista en estos momentos después del asalto al Capitolio?
Le haría mucho bien a Biden y a la nación adoptar un tono optimista. El asalto al Capitolio debe presentarse como una aberración vergonzosa, no como una especie de “nueva normalidad” para la política estadounidense. Biden debe buscar el regreso a la normalidad, priorizar una campaña de vacunación en este primer año en el cargo. El objetivo debe ser regreso al trabajo, regreso a la escuela, regreso al cine, a los eventos deportivos y a las vacaciones. También puede prometer, ojalá sinceramente, un tono más civilizado en nuestro discurso político. La mayoría de los estadounidenses están desesperadamente hambrientos de esas dos cosas: volver a la vida normal y bajar la temperatura política en nuestra sociedad. Si Biden cumplir en esas áreas, tendrá una presidencia muy exitosa.
El desplante de Trump en la ceremonia, ¿fue un mensaje para sus votantes y seguidores?
Con su ausencia mantiene viva la idea de que Trump fue engañado en las elecciones del 3 de noviembre y que no fue derrotado legítimamente en las urnas, un tema de fe entre sus seguidores más fervientes. Sus declaraciones en los últimos días han sido razonablemente amables, pero ciertamente mantiene abiertas sus opciones políticas en caso de que la Presidencia de Biden no vaya bien.
En este sentido, ¿cómo valora los últimos días de Trump en la Casa Blanca? ¿Hay precedentes de este nivel de bloqueo y obstrucción en el proceso de traspaso de poderes en la historia de Estados Unidos?
Las transiciones varían en su nivel de amabilidad y cooperación, pero este nivel de resistencia y bloqueo no tiene precedentes en la historia moderna. La negación de Trump de los resultados de las elecciones durante tanto tiempo retrasó elementos importantes de la transición, aunque aparentemente hubo cierto nivel de coordinación entre las agencias críticas. Sin embargo, el hecho de que Biden fuera vicepresidente significa que hay menos curva de aprendizaje para él de lo que podría ser para una figura externa.
Es clave que Biden se acerque a los votantes de Trump con respeto y se centre en lo urgente y no en asuntos indentitarios