Las inversiones de los deportistas españoles
Ser rico no significa solo ganar dinero, también hay que saber cómo invertirlo ● Los profesionales tienen una carrera corta y si no planifican bien sus ahorros pueden llegar a arruinarse
Los profesionales de elite han optado en los últimos años por dejar en manos de especialistas la gestión de su patrimonio. Aconsejados por sus asesores, la mayoría apuesta por evitar el riesgo e invierte en negocios conservadores que les permitan rentabilizar a largo plazo lo ahorrado en su juventud
Discotecas, clubs de ocio, gimnasios, obras de arte, bodegas, caballos, caprichos extravagantes... están entre las inversiones de muchos de los deportistas que se aventuran en negocios de más o menos éxito. La revista especializada «Sports Illustrated» informó hace unos años en uno de sus artículos que el 78% de los jugadores de la National Football League (NFL) se declaraba en bancarrota o en situación de estrés financiero a los dos años de su retirada, y que aproximadamente el 60% de los jugadores de la NBA están arruinados a los cinco años. Para no repetir errores como estos, han proliferado los asesores de las grandes estrellas del deporte, que velan por su patrimonio y les aconsejan invertir en productos sencillos y fáciles de entender.
«Antes de nada, los deportistas deberían invertir en función de su capacidad económica real», señala Julio Senn, socio responsable del área de Sports & Entertainment de Garrigues y asesor de grandes figuras del fútbol. A principios de 2020, la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) firmaba con Tressis, una empresa que gestiona patrimonios, un acuerdo para asesorar a los jugadores con el fin de que éstos puedan realizar una idónea y acertada planificación de sus finanzas, tanto cuando están en activo como cuando se han retirado. «En España, por lo general, hay poca cultura financiera, y los futbolistas no son una excepción. Los jugadores empiezan muy pronto su carrera deportiva y no están pensando en su futuro. Es muy difícil gestionar un dinero que ganas durante 14 años para que te rente los siguientes 50 años que te pueden quedar de vida», explica Ignacio Chinarro, director financiero de AFE.
Un futbolista profesional de Primera gana de media un salario bruto anual de 1,2 millones de euros, excluyendo a los jugadores de Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid (cuyas nóminas son mucho más abultadas), mientras que el sueldo medio de los jugadores de Segunda división está en torno a los 200.000 euros brutos al año. Son jugosos estipendios pero que, como recuerda Chinarro, están sujetos a gravámenes del 45%. «No es verdad que los jugadores de fútbol paguen pocos impuestos. Podría decirse que los 1.050 jugadores de Primera división pagan el 1% de todo lo que se recauda en España», apunta Chinarro. «En el mundo de la inversión no hay recetas mágicas. No es fácil decir invierte aquí o allí, pero sí la de invertir el dinero que no se necesita. Aunque no hay una regla general, tiene que primar la prudencia y no invertir en lo que se desconoce, no cometer locuras. Tampoco se debería meter todo el dinero en la misma cesta, hay que diversificar, y analizar los tipos de cesta», apunta Chinarro.
El capitán del Real Madrid Sergio Ramos y el jugador del Barcelona Leo Messi son ejemplos de éxito deportivo y en sus negocios, aunque también han tenido algún que otro tropiezo. En 2008 Ramos perdió tres millones de euros con la quiebra de Lehman Brothers, tenía solo 22 años, y hace un año evitó el embargo iniciado por el Banco Santander por el impago de un préstamo de 35 millones de euros vinculado a la compra de unos terrenos en las afueras de Madrid, adquirido a través de la empresa de Desarrollos Inmobiliarios Los Berrocales S. L. de la que Ramos tiene el 49,99% del capital. Finalmente, el fondo Blackstone adquirió dichos terrenos a cambio de cancelar la deuda. Sin embargo, ha convertido una de sus aficiones, los caballos, en un negocio rentable. Tanto que de su patrimonio forma parte Yeguada SR4, y puede presumir de tener en sus cuadras al flamante campeón del mundo de Pura Raza Española: Yucatán de Ramos. El capitán madridista ya ha manifestado públicamente en más de una ocasión que es el negocio más boyante que posee. Aunque su faceta emprendedora viene de lejos. Ya en 2004, antes de fichar por el Real Madrid, Ramos había creado la sociedad Sermos 32 SL, aún hoy cabecera de sus empresas, y atesora unos
activos que rozan los 100 millones de euros. El arte es la otra gran afición e inversión de Sergio Ramos. Junto a su mujer, la presentadora y modelo Pilar Rubio, se ha embarcado en la compra de obras maestras. Atesora ya una impresionante colección bajo el nombre «Sergio Ramos Collection». La última adquisición que se conoce del futbolista andaluz es una obra de Phil Frost, un pintor nacido en Nueva York en 1973, cuyos cuadros llegan a alcanzar los 40.000 euros.
En los últimos años, Leo Messi ha invertido en hoteles, en el sector inmobiliario y en ropa. No solo tiene negocios en España, sino también en su Argentina natal. El delantero es dueño de Torre Aqualina, un edificio de 125 metros de altura y 40 plantas, ubicado en la ciudad de Rosario y cuyo valor se estima en 127 millones de euros. Entre sus negocios infructuosos estuvo la inmobiliaria el Rincón del Rosario S.L., la única sociedad en la que figuraba como administrador junto a su hermano Rodrigo Messi en nuestro país y que tuvo que cerrar. Dedicada al alquiler de bienes inmuebles por cuenta propia, arrojó pérdidas por 355.386,09 euros en el ejercicio 2018 (el último presentado en el Registro Mercantil). Javier Arizmendi, ex futbolista profesional y ahora asesor financiero de Tressis, explica que las inversiones de los deportistas «suelen estar bastante escoradas hacia el sector inmobiliario», que, como se ha visto, ha dado más de un quebradero de cabeza a los jugadores. «Aunque siguen sucediéndose errores, cada vez se cometen menos. Los deportistas han adquirido una mayor conciencia de la importancia de asesorarse bien», explica Arizmendi. «La vida de un jugador profesional de fútbol no es la más propicia para manejar y controlar grandes flujos de dinero. Vuelcas el 100% de tu tiempo a ganar partidos, por eso es importante asesorarse bien e invertir el dinero con razón, un sentido y, en base a un estudio o diagnóstico financiero. El futbolista joven tiene dinero y un horizonte temporal largo, por lo que puede exponerse a que sus inversiones tengan curvas a cambio de una rentabilidad mayor».
Pedro Riesco, exjugador del Rallo Vallecano, trabaja en la agencia de futbolistas de René Ramos (hermano de Sergio Ramos), y explica que, por lo general, los deportistas se dejan asesorar: «Hay mucho oportunista, los futbolistas atraen a todo tipo de inversores». Julio Senn añade que invierten menos de lo que uno puede llegar a pensar. «Las inversiones de la gran mayoría de los futbolistas son de carácter bancario, financiero, invierten en energía fotovoltaica, eólica, pequeñas inversiones pero diversificadas. Aunque algunos tengan participaciones en el sector inmobiliario, pero son siempre minoritarias». Otros como el centrocampista francés Mathieu Flamini han invertido en el sector energético. Desde 2008 es inversor de la empresa GF Biochemicals, una compañía pionera en la producción de ácido levulínico, molécula que puede ser un sustitutivo del petróleo y que supone una alternativa revolucionaría dentro del sector energético a nivel mundial.
Errores que se pueden cometer es invertir más de lo que se puede. Rafa Pascual, ex jugador de voleibol y gestor de clientes patrimoniales en Intermoney Patrimo
Un jugador de Primera gana una media de 1,2 millones al año. Lo que gana en 14 años debe mantenerle otros 50
nios, apunta que «lo importante es tener liquidez cuando se acaba la carrera como deportista». La regatista española de los 80 y 90 Theresa Zabell, doble campeona olímpica y exvicepresidenta del Comité Olímpico Español (COE), cuenta que cuando dejas de navegar, muchos acaban en números rojos. «Hay que saber administrarse», avisa.
Invertir en restauración es también un plato de buen gusto. Un sector por el que se han inclinado el campeonísimo del tenis Rafa Nadal y el baloncestista Pau Gasol con sus restaurantes Tatel, una aventura a la que se han sumado Cristiano Ronaldo y el cantante Julio Iglesias. Pronto abrirán su cuarto Tatel en Los Angeles. La inauguración tendrá lugar en Canon Drive, muy cerca de Rodeo Drive, la milla de oro de la ciudad por donde la «Pretty Woman» Julia Roberts realizaba sus compras.
Pero más allá de la restauración, la otra gran inversión de Rafa Nadal es la inmobiliaria y su escuela de tenis en Manacor, tal vez la mejor academia del mundo y que además cuenta con un hotel y una residencia. A través de su sociedad Monemvasia, Rafa Nadal gestiona participaciones en el sector hotelero y ha comprado un edificio frente al Tribunal Supremo en Madrid y varios en Lisboa.
Más conservadoras
Diversificar, esa es la palabra más repetida por los asesores financieros de las estrellas deportivas. «Actualmente detecto que las inversiones son menos absurdas, y más conservadoras. Los deportistas intentan no invertir en restaurantes o discotecas, donde el empresario tiene que estar al frente. Lo hacen más en ladrillo, es decir, en renta pasiva», señala Íñigo Abrego, abogado fiscalista de PKF Attest.
Un claro ejemplo de diversificación es Cristiano Ronaldo. La última aventura del futbolista de la Juventus ha sido una clínica de trasplantes capilares abierta en Madrid. Un proyecto que se suma a otros negocios con origen en Portugal, como su alianza con el grupo hotelero luso Pestana donde ostenta el 50% con su enseña
CR7, una marca «lifestyle» con la que está presente por ahora en su Madeira natal y Lisboa, y en el futuro en Madrid, Nueva York, Marraquech y París.
Invertir en otros negocios es uno de los caminos elegidos por las estrellas del deporte y las startups tecnológicas son su nueva apuesta. Si la idea de negocio es buena les puede brindar mucho dinero. La inversión inicial en este tipo de negocios es pequeña en comparación con los beneficios que les reporta. Según cita la revista «SportsAdda», el famoso baloncetista australiano Steven Smith invirtió 100.000 dólares en una startup, y cuatro años después le generó unos beneficios de 12 millones de dólares.
En el terreno español, Gerard Piqué y Andrés Iniesta se lanzaron a la nueva ola del emprendimiento. En el caso de Piqué, fundó en 2011 junto a otros socios la startup de videojuegos llamada «Kerad Games», aunque hace dos años tuvo que liquidarla por registrar pérdidas que superaban los dos millones de euros. Sin embargo esto es solo una pequeña mancha en la exitosa carrera empresarial del azulgrana. El portugués Ronaldo apostó, por la app «Mobitto». Una startup que ofrece a los usuarios descuentos e información sobre tiendas y restaurantes con las mejores ofertas.
Andrés Iniesta, exjugador del FC Barcelona, y uno de los futbolistas mejor pagados del mundo según la revista «Forbes», decidió entrar en 2015 en el capital de la startup catalana FirstVision Technologies, que comercializa camisetas con cámaras integradas para alta competición. Los eSports también se han convertido en uno de los negocios más lucrativos del presente y elegidos por deportistas como Fernando Alonso con inversiones que ascienden a cinco millones de dólares.
Deportistas femeninas
Las deportistas féminas también triunfan en el mundo de los negocios, sobre todo las tenistas. Es el caso de la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza. Según la revista «Forbes» con tan solo 26 años se ha convertido en la sexta atleta femenina mejor pagada del mundo en 2020 con unas ganancias de 6,6 millones de dólares, 2,1 millones logrados en premios y 4,5 millones que le reportan sus contratos con empresas como Adidas, Beats o Rolex. También la nadadora y cuatro veces medallista de oro Gemma Mengual ha emprendido diversos negocios que van desde el diseño a la restauración. En 2010 fundó la empresa Mengui La Mar de Sushi, de la que es administradora única y por la que gestiona diversos restaurantes de ese tipo de comida en San Cugat del Vallés y Barcelona. También puso en marcha otro proyecto personal, una colección de joyas.