Casi 200.000 autónomos sin ayudas se irán al paro
El 41% de los que cobran el cese de actividad cerrará cuando agote la prestación. La Administración les debe 80.000 millones
«El RETA presenta unas cifras de cotizantes que están absolutamente infladas. La realidad es que 150.000 autónomos serán baja definitiva en cuanto dejen de percibir las ayudas y se les exima de cotizar a la Seguridad Social». Esa es la terrible previsión que ha hecho Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), durante la presentación del XI Barómetro de Situación de los Autónomos. Esta cifra resulta de los 193.000 autónomos que se encuentra percibiendo percibiendo la prestación por cese de actividad en estos momentos y que han reconocido ya que se irán directamente al paro una vez que pierdan la prestación por cese de actividad y la resta de las nuevas altas previstas para este año, unas 43.000. Eso son cuatro de cada diez autónomos protegidos. A esto habría que añadir los 300.000 negocios que habrán echado la persiana durante la pandemia. Para Amor, el Gobierno debería dar una solución definitiva a los autónomos que están en cese de actividad y no tienen pensado volver a su negocio. Entiende que la forma más rápida para «desengancharlos» pasa por no eternizar esta prestación y ofrecerles una ayuda económica durante cuatro meses y después determinar quién puede volver a reemprender y quién lo deja definitivamente. «No puede eternizarse esta ayuda y que se convierta en una especie de paro encubierto».
Ata estima la pérdida de facturación de los autónomos en más de 75.000 millones de euros desde el pasado mes de marzo de 2020. Casi un millón de trabajadores por cuenta propia –el 30,7%-– asegura que sus pérdidas son superiores a los 30.000 euros, principalmente en el sector del turismo y el ocio, y en el comercio. Se sumaría otro millón más –el 60,6% del total– con una pérdida de ingresos mínima de 15.000 euros. Por este motivo, dos de cada tres autónomos tienen algún tipo de restricción en su negocio, mientras que un 52,2% afirma que, aunque ha abierto, está funcionando al 50%. Por su parte, 350.000 autónomos tienen aún cerrada su actividad.
Esta pérdida tienen mucho que ver con la morosidad que arrastran las Administraciones públicas con los autónomos y sus negocios, que se cifra en 80.000 millones. «Habría que plantearse una solución, dado el volumen tan importante de esta deuda y en las actuales circunstancias. Debería de establecerse un régimen que penalice y sancione a las administraciones que incumplan la ley, lo mismo que si un ciudadanos no paga un impuesto o no cumple con sus obligaciones inmediatamente tiene una sanción. No se puede permitir», espetó Lorenzo Amor.
En cuanto a las ayudas directas, el 80% de los autónomos asegura que son «claramente insuficientes», aunque más de la mitad de estos, el 48,2%, se verá obligado a solicitarla una vez se abra el plazo. Entre los que dicen que no van a solicitarla, los principales motivos son o bien porque «no están en el listado de actividades con derecho a ayudas» o porque su actividad «no ha caído más de un 30%». Únicamente el 12,4% señala que no va a solicitar las ayudas porque no lo necesita. Por otro lado, en caso de que se prorrogue la prestación por cese de actividad más allá de mayo, un 21,2% de los autónomos han señalado que prevén solicitarla.
Amor cree que debe cerrarse cuanto antes –«y no esperar al último momento»– la prórroga por cese de actividad para los autónomos y buscar una salida a los ERTE, y recordó que «el Gobierno debe ser consciente de que hay trabajadores en expediente temporal que no van a volver a su puesto de trabajo porque sus empresas no van a poder reabrir. Y, por eso, debe entender que si a las empresas no se les permite reducir sus plantillas para ajustarse a su situación económica, la única opción que es les va a quedar es el cierre definitivo». Por eso, Amor pide flexibilidad y «tomar decisiones realistas. Será mejor que un negocio vuelva a abrir con la mitad de sus trabajadores que no lo haga y se vayan todos al paro».