180.000 euros para vigilar Meirás y 40.000 para el jardín
Los Franco gastaban 36.000 euros al año en el cuidado de la finca
El Pazo de Meirás, pendiente de la resolución del Tribunal Supremo sobre la propiedad que reclama la familia Franco –dueña del inmueble durante 82 años–, está suponiendo de momento un importante desembolso al Estado.
Moncloa ha hecho público el gasto de los contratos de servicios adjudicados desde el 10 de diciembre para el mantenimiento y la seguridad del Pazo. Asciende a unos 155.911 euros, según se recoge en una respuesta a las diputadas gallegas del PP en el Congreso Tristana Moraleja, María Valentina Martínez y Marta González.
En contestación a la pregunta presentada por escrito el pasado 19 de febrero, el Gobierno, además de detallar unas partidas en las que se no se incluyen contratos de obras y suministros, avanza que está prevista la contratación, ya a largo plazo, de servicios de mantenimiento y jardines y zonas verdes, por un importe aproximado estimado para este año de 40.000 euros, y de vigilancia y seguridad del entorno del inmueble, por un importe en torno a 180.000 euros.
En la respuesta se detallan trabajos de puesta a punto inicial de los jardines y zonas verdes del inmueble, por importe de 17.103,35 euros y de mantenimiento por 17.424 euros, cuantía que incluye tres meses. A ello se añaden el servicio de vigilancia de seguridad del Pazo y del entorno, con una duración estimada de cuatro meses y un importe de 115.000 euros. También se especifican varias reparaciones e instalación eléctrica por 4.440,70 euros y de limpieza, por 1.943,26 euros, en relación a un periodo de dos meses.
El Ejecutivo apunta que además «está prevista la contratación, ya a largo plazo, de servicios de mantenimiento de jardines y zonas verdes, con un importe aproximado para 2021 de 40.000 euros». A esto suma un servicio de vigilancia y seguridad del entorno del inmueble, con un importe aproximado de 180.000 euros para este año.
«Es un absoluto disparate», asegura Luis Felipe Utrera-Molina, abogado de los Franco. «La Xunta se negó a asumir los gastos de seguridad», y la familia tuvo que contratar un servicio de vigilancia desde el momento en que se abrió al público como Bien de Interés Cultural (BIC), má su no dev ideo vigilancia. El coste de mantenimiento y seguridad sería inferior a 3.000 euros al mes, según fuentes cercanas a los Franco. Cifra que abarca los sueldos del matrimonio de guardeses de la propiedad, la vigilancia –los cuatro días de visita al mes– y la alarma. El letrado asegura no tener «muy claras» las «intenciones» del Gobierno. «No sé si pretenden que mis clientes tengan que reembolsar esas cantidades si ganan en el Supremo», concluye.
Con la familia, los sueldos del matrimonio de guardeses, la vigilancia y la alarma era inferior a 3.000 euros al mes