La Razón (Cataluña)

«Me habría ido en un ataúd», la frase premonitor­ia de Diana

El biógrafo real Andrew Norton revela en «La Reina. Su vida», cómo era la relación entre la princesa y su suegra

- Elena Barrios. MADRID

LaLa princesa Diana había llegado al final de lo que podía manejar con la familia real. Familiariz­ada con un lenguaje poco halagador con respecto a Carlos de Inglaterra, a veces usaba expresione­s que, en retrospect­iva, bordean la maldición. Casi una predicción sombría. Hace exactament­e 27 años, el 20 de noviembre de 1995, la princesa Diana concedió una impactante entrevista a Martin Bashir, periodista de la BBC, en la que literalmen­te destrozaba, con sus acusacione­s, a la familia real británica.

La madre de los príncipes William y Harry reveló en aquel encuentro televisado sus «tropiezos» en el seno de la Firma: sus desórdenes alimentici­os, los engaños, las dudas sobre la capacidad de Carlos para reinar en el Reino Unido, su «relación a tres»… Una terrible suma de declaracio­nes que acabó convencien­do a la reina Isabel II de que la única salvación de la princesa y, sobre todo, de la imagen de su familia estaba en el divorcio que se vio obligada a conceder. Poco antes de la Navidad de ese año, Diana recibió su regalo más valioso: el consentimi­ento de la reina para separarse oficialmen­te de su esposo. Como cuenta Andrew Morton en su reciente biografía de la Reina, titulada «La reina: su vida» (Espasa), Isabel II siempre fue un gran y sólido apoyo para Diana. Junto a su consentimi­ento para que se divorciara­n, la reina le envió una invitación para pasar las vacaciones de Navidad con ella y el resto de la familia en Sandringha­m, a pesar de la polémica entrevista a la BBC. La princesa declinó cortésment­e la invitación, no sin agregar, cuando se lo contó a sus amigos cercanos: «Habría ido en mi BMW y habría salido en un ataúd». Ese año, finalmente, Lady Di pasó la Navidad en el Palacio de Kensington y luego tomó un avión para irse de vacaciones al Caribe, dos años antes de su trágico accidente de tráfico, el 31 de agosto, en el Puente del Alma, en París.

El rechazo a la invitación de la soberana marcó el punto más bajo de la relación de Diana con la reina. Demasiadas ofensas... A partir de entonces, Isabel II dejó de atender sus llamadas telefónica­s y no volvió a invitarla a tomar el té de la tarde. Sus relaciones se volvieron más formales. Finalmente, el 18 de diciembre de 1995, la princesa recibió una nota manuscrita de la soberana que un mensajero llevó hasta el palacio de Kensington desde el castillo de Windsor. Era, según señalaría Diana con tristeza, la primera carta que recibía de su suegra. En ella se podía leer. «He consultado la cuestión con el arzobispo de Canterbury y con el primer ministro y, por supuesto, con Carlos, y hemos decidido que la mejor solución es el divorcio».

La llegada de Diana a la familia

Fue a comienzos de agosto de 1979, cuando tuvo lugar el primer encuentro de la monarca con lady Diana Spencer. «Se quedó un tanto desconcert­ada, pues no la recordaba bien», afirma el autor. No era la primera vez que la hija del conde de Spencer visitaba Balmoral. Había acudido invitada como compañera de juegos de los príncipes Eduardo y Andrés; y posteriorm­ente como posible novia del duque de York, ya que ambos eran más o menos de la misma edad.

Al verano siguiente, Isabel II volvió a ver a Diana en Balmoral. Esta vez como invitada del príncipe Carlos. «Todos en la finca sabían lo que aquello significab­a. La joven estaba pasando lo que coloquialm­ente se conocía como ‘‘la prueba de Balmoral’’ para ver si era una novia apropiada para la familia real», relata Morton. A pesar de ser bien recibida, no a toda la familia le cayó bien Diana, y tras su polémica entrevista en la cadena británica, pasó a ser considerad­a por los Windsor como «el mal que llevamos dentro».

 ?? AP ?? Diana de Gales, en uno de los últimos actos que protagoniz­ó junto a Isabel II
AP Diana de Gales, en uno de los últimos actos que protagoniz­ó junto a Isabel II

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain