Los fijos discontinuos avivan las denuncias de «maquillaje» en el paro
El desempleo cae en 33.500 personas, pero la afiliación se estanca y los contratos temporales siguen superando a los indefinidos
VariasVarias malas noticias se acumularon ayer tras la publicación de los últimos datos de desempleo -que cayó en 33.512 personas (-1,15%) en el mes de noviembre–. Primero, ya queda patente que la creación de empleo empieza a estancarse. Aunque la pérdida de afiliación es casi simbólica (155 cotizantes menos), deja claro que la ralentización económica se está reflejando sobre el empleo. Segundo, el número de contratos se ha desplomado casi un 30% durante el último año, hasta alcanzar 1.424.283, con una reducción del 2,7% en el número de contratos indefinidos respecto al mes anterior. Y tercero, el crecimiento del número de contratados como fijos discontinuos sigue levantando las suspicacias y las acusaciones de expertos, organismos independientes y partidos de la oposición sobre el «maquillaje» y la «distorsión» estadística que generan sobre las cifras reales de desempleo.
Se refieren los analistas a que de los 615.236 contratos indefinidos firmado sen noviembre–un 117,4% más que hace un año, pero que únicamente agrupan el 43% del total–, solo 252.714 fueron a tiempo completo y 149.575 se firmaron a tiempo parcial, más del doble que un año antes (+104,5%). Además, 212.947 fueron los polémicos contratos fijos discontinuos, que han multiplicado por más de seis la cifra de noviembre de 2021, ascendiendo casi un 526%. Este despegue se explica porque las empresas utilizan esta modalidad de contrato para la mayoría de las incorporaciones que antes se establecían como temporales «para evitar problemas con la Inspección de Trabajo, que mira con lupa ahora cualquier contrato que no sea indefinido», explican fuentes de los gestores laborales, que recuerdan que oficialmente estos contratos no son considerados temporales por la Administración porque no engrosan las cifras del paro al considerarse trabajadores en activo, aunque cobren el desempleo, pero «en la práctica son trabajadores sin relación laboral y contractual».
Además, los contratos temporales siguen superando en número total a los indefinidos –contando los de a tiempo parcial y los fijos discontinuos entre los indefinidos–, ya que se firmaron 809.047 contratos temporales en noviembre, noviembre, un 53,4% menos que en igual mes de 2021.
Con estas cifras, expertos y analista s continúan advirtiendo de este embolsamiento de contratación temporal encubierta. Desde BBVA Research hablaban esta semana de que los trabajadores con contrato fijo discontinuo integrados como población activa «distorsionan» el cálculo de los efectos del empleo sobre el crecimiento del PIB. Ante esta realidad, avanzaron estudian un cambio de sus modelos de estimación para evitar enjuagues estadísticos.
Por su parte, un análisis de Fedea, dirigido por el investigador Florentino
Felgueroso, alertó sobre una brecha de «160.000 parados ocultos» en contratos fijos discontinuos, determinados por un« ajuste no comunicado» por el SEPE en los registrosde demandantes de empleo con este tipo de contrato, que generó ese agujero respecto a la cifra oficial de descenso de desempleados en el mes de octubre, da toque se mantiene en niveles similares en los datos publicado s ayer. Porello, Felgueroso concluyó que la contabilización de los discontinuos distorsionan la estadística por una gran falta de información, que no permite valorar el «tamaño real del ajuste» de los que denomina «parados efectivos».
Y lo mismo pasa con los 20.000 trabajadores en ERTE, que como los fijos discontinuos se encuadran en el grupo de «demandantes de empleo con relación laboral» y no figuran como parados aunque lo estén, en una cantidad que va en aumento y que se acerca ya a los 450.000 trabajadores.
Por su parte, el centro de estudios de Adecco advierte de la disparidad en la evolución del desempleo en noviembre, porque la cifra de parados no crece, pero los demandantes de empleo no ocupados siguen a la baja, arrastrados por la caída de los fijos discontinuos respecto a octubre (-18%). Destaca también que, los contratos indefinidos caen más que los temporales, con un desplome del 28% entre los que los contratos formativos. Además, por primera vez desde febrero de 2021, cae la firma de contratos a tiempo parcial (tanto fijos como temporales). En total se firmaron 1,42 millones de contratos, el menor número para un noviembre desde 2014.
Desde el Gobierno no ven aspectos negativos. El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, insistió ayer en que no ha habido ningún cambio de metodología respecto a lo que se hacía antes y cargó contra los que han creado una «polémica espuria, y estéril amplificada». El ministro ve en estas polémicas un «intento desesperado y angustioso por intentar ensuciar unos datos extraordinarios».
Desde Fedea alertan de una bolsa de 160.000 parados ocultos con contratos fijos discontinuos