El Parlament retrasa la destitución de Borràs
► La Mesa presenta alegaciones ante la JEC y maniobra con el voto de Lluís Puig
El Parlament defenderá el escaño de Laura Borràs (Junts) ante la Junta Electoral Central (JEC) y presentará alegaciones en contra de retirarle las credenciales sin sentencia firme. Un posicionamiento que ha secundado ERC, además de los posconvergentes y la CUP, pese a su condena por corrupción.
El pasado jueves, la JEC emplazó a la vicepresidenta del Parlament y presidenta en funciones, Alba Vergés (ERC), a que en un plazo de diez días –termina el 28 de abril– tome una decisión sobre la retirada o no del escaño de Borràs tras haber sido condenada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) a cuatro años y medio de cárcel y 13 de inhabilitación por adjudicar contratos a dedo.
La Mesa de la Cámara se reunió ayer por la mañana y decidió presentar alegaciones con el voto en contra del PSC. El independentismo ya se posicionó de la misma manera con el caso del diputado de la CUP, Pau Juvillà, condenado por desobediencia por el TSJC. Una postura que va en contra de la JEC: el organismo recuerda en su escrito que la Ley Electoral fija como causa de inelegibilidad sobrevenida la existencia de una sentencia, aunque no sea firme, por delitos contra la Administración Pública.
La JEC ya subrayó que ante una eventual «inactividad o cualquier otra razón» puede actuar la Administración Administración electoral «en aplicación directa» de la ley y resolver el caso. Es decir, la Junta Electoral actuará de oficio y retirará el escaño a Borràs si el Parlament no lo hace dentro del periodo establecido, un procedimiento que se retrasará por las alegaciones de la Cámara.
Por otro lado, la Mesa maniobró ayer y recuperó la fórmula del voto telemático de la pandemia para posibilitar que el huido Lluís Puig participe en el pleno sorteando así al Constitucional.