El frío suspende clases pero se recupera la movilidad
El episodio de frío por la borrasca Filomena, que ha traído nevadas y un descenso de las temperaturas, llevó ayer a la suspensión de las clases en 33 municipios de la Comunitat Valenciana, con 21.600 alumnos afectados, pero ya se ha recuperado la normalidad en la movilidad y la red principal de carreteras está abierta excepto un tramo de la N232.
Los trabajos de limpieza continúan en carreteras, accesos a granjas o infraestructuras tras las nevadas del fin de semana y ayer todos los servicios esenciales y suministros funcionan con normalidad y no había ningún municipio aislado o con cortes en el suministro eléctrico por los efectos de la borrasca.
La Comunitat Valenciana vive el episodio de frío más prolongado desde 2012 y los dos o tres próximos días no hay que esperar nevadas pero sí temperaturas frías, sobre todo esta pasada madrugada, tal y como advirtió a EFE el Jefe de Climatología de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Comunitat Valenciana, José Ángel Núñez.
Las temperaturas máximas registradas sobre el mediodía rozaron los 13 grados en la ciudad de Alicante (12,8) y bajaron de los -4 en la localidad castellonense de la Pobla de Benifassà (-4,3).
Llegan las vacunas
A pesar de las complicaciones que la borrasca provocó en las carreteras y el transporte, ayer se recibieron las 31.000 dosis semanales de la vacuna contra la covid para su reparto en las tres provincias.
Según el balance realizado por la Conselleria de Educación, se suspendieron las clases en tres municipios de Alicante, con 5.400 alumnos afectados; 16 de Castellón, con 1.600 alumnos afectados, y 14 de Valencia, con 14.600 alumnos, como consecuencia de la ola de frío y nieve.