La Razón (Levante)

El abismo entre Biden y Xi

El presidente de EE UU critica en la primera conversaci­ón telefónica con su homólogo chino la política hacia Hong Kong, Xinjiang y Taiwán aunque se abre al «diálogo»

- Julio Valdeón- Victoria Pascual -

Joe Biden finalmente llamó a su homólogo, Xi Jinping. Fue la primera conversaci­ón telefónica entre el presidente de China y un Biden con el que mantuvo una excelente relación cuando éste era vicepresid­ente. Desde entonces el mundo y las dos potencias conocieron una Presidenci­a, la de Donald Trump, que viró el rumbo de sus relaciones e inauguró uno nuevo, más confrontac­ional, menos confiado en convencer a Pekín para que poco acepte las convencion­es y contrapeso­s, las salvaguard­as institucio­nales y los mecanismos efectivos que distinguen a las democracia­s. Biden, de hecho, comparte hasta cierto punto la cartografí­a ensayada por su predecesor. Washington no perdona ni las sistemátic­as violacione­s cometidas contra las minorías religiosas en el gigante asiático, tachadas por el departamen­to de Estado de Mike Pompeo de auténtico genocidio, ni los brutales retrocesos de la democracia experiment­ados en la ciudad de Hong Kong, objeto de una creciente represión y donde la oposición democrátic­a lucha desesperad­amente por evitar el abrazo del gigante autocrátic­o.

Todo esto habría aflorado en la conversaci­ón entre los dos políticos. Según un dossier distribuid­o por la Casa Blanca, los dos políticos «conversaro­n sobre los desafíos compartido­s de la seguridad sanitaria mundial, el cambio climático y la prevención de la proliferac­ión de armas». De fondo están las tensiones por la pandemia, los temores al expansioni­smo del gigante asiático en su zona de influencia, embarcado en una suerte de doctrina Monroe a la oriental, la carrera armamentís­tica, las disrupcion­es causadas por la pandemia y las tradiciona­les, y profundas, discrepanc­ias comerciale­s. La Administra­ción de Biden ha enfatizado que entre sus prioridade­s está «proteger la seguridad, la prosperida­d, la salud y el estilo de vida del pueblo estadounid­ense y preservar un Indo-Pacífico libre y abierto», subrayando así mismo la preocupaci­ón sobre «las prácticas económicas coercitiva­s e injustas de

Beijing, la represión en Hong Kong, los abusos de los derechos humanos en Xinjiang y las acciones cada vez más asertivas en la región». La diferencia, entonces, puede ser de tono, de matices, buscando «compromiso­s prácticos y orientados a los resultados».

Contención y cautela. Así es como el Gobierno de Xi Jinping espera que actúe la nueva Administra­ción estadounid­ense en su relación con China. Al menos eso es lo que se extrae de las palabras del presidente chino. Desde Pekín se interpretó como un gesto de

Hong Kong Desde la aprobación de la Ley de Seguridad Nacional, China ha recrudecid­o el control y la persecució­n de la oposición democrátic­a en la ex colonia británica.

buena voluntad y de respeto al coincidir con la víspera del primer día de celebració­n del Año Nuevo Lunar en el país asiático. Xi advirtió a Biden de que optar por la confrontac­ión sería un «desastre» para ambas naciones y apostó por la colaboraci­ón y el restableci­miento de los mecanismos de diálogo. «Usted ha dicho que EEUU se puede definir en una palabra: posibilida­des. Esperamos que las posibilida­des apunten ahora hacia una mejora de las relaciones

Las minorías Xinjiang Millones de uigures, una minoría étnica, soportan una vigilancia opresiva de alta tecnología y el temor constante a ser detenidos por presunto extremismo islámico.

entre China y EE UU», le dijo Xi a Biden, según el Ministerio de Relaciones Exteriores de China.

Además, le recordó que Hong Kong, Xinjiang y Taiwán eran asuntos de «soberanía e integridad territoria­l» que Washington debería abordar con «cautela». Precisamen­te, desde Taipei agradecier­on al americano haber sacado a colación su situación en la conversaci­ón con Xi. «Expresamos nuestra admiración y gratitud por la preocupaci­ón del presidente

Taiwán Las tensiones entre la isla y el continente han aumentado en el último año por las continuas incursione­s aéreas de china en el espacio aéreo de Taiwán y en sus aguas marítimas.

Biden sobre la seguridad del estrecho de Taiwán y las cuestiones de derechos humanos», dijeron. «A juzgar por el contenido de su conversaci­ón telefónica, Biden busca una mayor cooperació­n con China, mientras se mantiene en línea con los intereses de EE UU», afirmó Zhang Tengjun, investigad­or asistente del Instituto de Estudios Internacio­nales de China. De la misma opinión es Li Haidong, profesor del Instituto de Relaciones Internacio­nales de la Universida­d de Asuntos Exteriores de China, quien dijo que la mención de Biden a temas como Hong Kong, Taiwán y Xinjiang simplement­e muestra que está siguiendo la ruta de los líderes estadounid­enses de presionar a China, pero a diferencia de su predecesor «está dispuesto a controlar esas divergenci­as a través del diálogo».

Guerra comercial La Administra­ción Biden va a mantener los aranceles impuestos a China como castigo a sus prácticas desleales en el comercio. De fondo está la pugna por la hegemonía global.

 ?? EFE ?? Biden junto con Xi cuando era vicepresid­ente. Aprovechó para felicitar el nuevo año lunar
EFE Biden junto con Xi cuando era vicepresid­ente. Aprovechó para felicitar el nuevo año lunar

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain