«El lema de mi casa con la covid es: ¡si me queréis, irse!»
Es artista. E hija, nieta y sobrina de artistas. Pero con respecto a su hijo, a Dios le pide que salga notario
EesEes artista. Y nieta, hija, sobrina, prima y hermana de artistas. ¿Su hijo? A Dios le pide que salga notario. Cosa de las sagas artísticas, obvio. Que un día, como aquel que dice, no haces la decla de la renta y te encuentras diciendo «si cada español pusiera una peseta…». Su abuela dixit, que era una genia. Matriarca de su clan, un clan que es la bomba. Furiase se remanga donde se lo pidan: acaba, en plena pandemia, de estrenar dos pelis, «Vampus horror tales» y «Rosalinda», y en TVE, cada domingo, se la puede ver en «Como sapiens». A ver si un día le piden cantar: sería un descubrimiento. Palabrita.
–Podría tener todas la papeletas para comportarse como una diva y, sin embargo, es un amor. No me diga que eso no es rebelarse contra sus circunstancias...
–Gracias. Rebelde, sí, pero sin causa.
–¿Cuándo supo que usted era quien era y estaba llamada a ser una estrella?
–¡Eso de estrella suena tremendo! Pero creo que siempre quise dedicarme a esto. Con 13 años empecé a hacer teatro y aquí sigo: buscando yo la estrella.
–¿Alguna vez quiso no haber nacida famosa?
–Muchas veces. En momentos en los que tu intimidad queda absolutamente expuesta a los demás… Pero es cierto que la fama, si no se te sube a la cabeza, te da momentos buenos también.
–¿Ser parte de una saga con tanto arte da vértigo, responsabilidad, orgullo o agobio?
–Admiro a mi familia, pero no me comparo con ellos. Eso sería darse de bruces continuamente y no pretendo ser más que nadie. Yo soy como soy y tengo el talento que tengo, más o menos. ¿Orgullo de ellos? Todo el del mundo. ¿Responsabilidad? Siempre con mi familia, pero no por ser una familia de artistas, si no por el respeto y ¡el amor a ellos!
–¿Hubiera sido más fácil
mamá no quiero ser artista que al revés?
–Hubiera sido igual... Aunque, sí que habría sido más difícil para ellos ayudarme en según qué casos. Lo bueno de dedicarnos todos a la misma empresa es que nos podemos ayudar mutuamente con conocimiento de causa.
–¿No ha pensado nunca en decir: oiga, paso de todo, pongo una mercería?
–Miles de veces. Aunque son
arrebatos…. Una mercería, no, pero sí irme al campo y montar un huerto...
–Cuando una es actriz ¿cuesta que la crean o siempre dudan de si está actuando?
–Eso me dice mucho mi pareja cuando estamos de broma. Me mira y me dice: «Actrices… no sé cuándo van en serio» (ríe).
–Confiéseme que a veces interpreta para conseguir lo que quiere…
–Si no es de broma, no me sale. Soy muy mala mentirosa.
–El papel más difícil de su vida.
–Ufff... el del día a día.
–¿Y cuál es ése que se muere por interpretar?
–Tengo muchas ganas de hacer cine quinquillero, de barrio, ¡castizo!
–¿Stanislavsky o Lina Morgan, método o intuición?
–El método es importante pero, sobre todo, la intuición.
–Se convirtió en estrella con «El internado» y era una «teenager». ¿La ha vuelto a ver o muere de la vergüenza?
–Suelo ver escenas porque en Instagram me siguen etiquetando y me da mucha ternura…
–¿Drama o comedia o melodrama?
–¡Melodrama siempre!
–¿Qué le resulta más fácil: arrancarse con una copla, bailar un tango o una escena de sexo en un set de rodaje?
–Las tres son difíciles, pero, oye, si hay que hacerlas, se hacen.
–Lo de «si me queréis, irse», ¿usted también lo ha dicho/ interpretado alguna vez?
–¡En casa, lo decimos todo el rato! ¡Con la covid es el lema! (risas).
–Le pongo en un compromiso: dígame su canción favorita de su saga familiar.
–«Pensando en ti», de mi madre. Quizá porque me la escribió a mí...
–Cuando ve películas como «Sonata de otoño», «Postales desde el filo», «Tacones lejanos»... Historias de madres e hijas acdecir:
trices, ¿usted qué opina? –Que me encantaría algún día hacer una película con mi madre.
–Oiga, y si el niño le sale notario, ¿qué haremos?
–¡Uy, nos facilitaría la vida muchísimo! ¡A Dios se lo pido!
–¿Le afectan las malas críticas?
–¡Siempre! Más que las buenas, por desgracia… El cerebro está fatal diseñado.
–¿Su chico no se pone celoso cuando da besos de tornillo en la pantalla?
–Esa información es confidencial y se queda en casa (risas).
–¿Lo suyo fue flechazo o pico y pala?
–¡Pico y pala desde hacía años!
–¿Qué es lo que más le chifla y lo que más le amuerma del amor?
–Me chifla el compartirlo todo con una persona con la que te entiendes a la perfección. Lo que sí que pediría es sentir los nervios del primer día, aunque sería agotador…
–¿Cómo ama: más a la argentina (con psicoanalista, por supuesto) o con toda la raza gitana del mundo?
–¡De ambas formas! Tengo una mente muy analítica y, luego, soy la más la pasional del planeta.
–¿Asado o potaje con habichuelas?
–Potaje de primero y asado de segundo.
–¿Qué dijo que nunca haría y ahora repite sin cesar?
–Ponerle dibujos en el móvil a mi hijo. Siempre me he negado y ahora él me lo pide y… caigo.