Un robot aspira a ser el nuevo David Guetta
Kuka puede controlar la pista con un software que le permite elegir las canciones según el ambiente del club
Martin Garrix, David Guetta, Avicci, Steve Aoki, Shrillex, Kura… son algunos de los DJ más famosos del mundo. Unos los son por el mundillo tan bohemio como sideral que han sabido crearse a su alrededor; otros, por su particular forma de pinchar música en un momento determinado. Sea como fuere, estos nombres están asociados al éxito, a la fiesta y la noche. Es cierto que, en los últimos meses, prácticamente no se les ha visto por motivos evidentes, pero la realidad es que sus mezclas y composiciones han seguido llegando de una forma u otra. Ahora bien, ¿qué ocurrirá de aquí a un tiempo? Avecinarlo resulta aún pretencioso, aunque todo parece indicar que la tecnología nos acompañará bastante de la mano.Sí, incluso en las discotecas. De hecho, en 2018 ya se hizo el amago de crear el primer DJ robotizado del mundo. Es de origen checo y se vale de la inteligencia artificial para dominar las pistas de baile. El reto fue planteado por los dueños del Karlovy Lazne Music Club de Praga, un local de música electrónica que lanzó la idea de diseñar una máquina para llevar a cabo sus sesiones nocturnas. El guante fue recogido por unos desarrolladores que cruzaron un algoritmo con un brazo mecánico.
El resultado fue Kuka, un robot que controla los escenarios gracias a un software especial que le permite elegir las canciones según cómo considere que está el ambiente del club. Éste puede seleccionar los discos de los bastidores cercanos y colocarlos en uno de los reproductores que tiene delante. Además, puede pinchar directamente y bailar al ritmo, algo que ha atraído la atención de fans de la electrónica y curiosos en la ciudad. «La gente está entusiasmada con él, pues no han visto nada similar en toda Europa. En realidad, no estoy seguro de si hay algo parecido en el mundo», señaló a Reuters por aquel entonces el gerente del establecimieno, Adam Lipsansky.
Los avances tecnológicos están llegando y cambiando por completo sectores tan clásicos como éste. No solo a nivel musical, sino también en aspectos relacionados con la iluminación, la entrada, el consumo o el disfrute. ¿Sabía, por ejemplo, que hay bolas que se pueden controlar desde el móvil? ¿O que las bebidas ya se pueden pedir desde una aplicación? Las máquinas están suponiendo una revolución que, dado el momento en el que estamos, parece no tener fin.