La tercera ola aumenta a 150 días las esperas quirúrgicas
Puig garantiza que los mayores de 80 estarán vacunados en 15 días y admite temor ante el aumento de casos por Semana Santa
La lista de espera quirúrgica para ser intervenido en los hospitales de la Comunitat Valenciana se sitúa en 150 días de demora estructural en el mes de febrero, según datos de la Conselleria de Sanidad Universal Pública.
La pandemia por coronavirus ha interferido en el ritmo de las intervenciones, ya que se tuvo que reducir la actividad de los hospitales para asumir la carga asistencial de pacientes covid-19 en los momentos de mayor presión asistencial.
La tendencia a la baja que se registró en noviembre de 2020, 120 días, frente a los 132 días del mes anterior, se vio afectada por la tercera ola por coronavirus y la reorganización de los servicios asistenciales, situando la demora en 125 días en diciembre y 142 días en el mes de enero.
La secretaria autonómica de Eficiencia y Tecnología Sanitaria, Concha Andrés, explicó que reactivación asistencial, junto con el plan de Autoconcierto y el Plan de Choque, permitirán reducir la demora estructural «siempre que la situación epidemiológica lo permita».
El número de pacientes que se encuentran en lista de espera quirúrgica en todos los Departamentos de Salud de la Comunitat Valenciana se sitúa en 70.369 pacientes.
Objetivo: menores de 80
La Comunitat Valenciana tiene capacidad organizativa para poner en marcha un proceso de vacunación masiva. El problema es que no tiene garantizadas las dosis. Así lo aseguró ayer el presidente de la Generalitat, Ximo
Puig, quien explicó que confía en que AstraZeneca y Pzifer cumplan con los compromisos acordados.
Ante esta situación de incertidumbre, Puig solo puede garantizar que en los próximos 15 días todos los mayores de 80 años estarán vacunados. A partir de este momento, se irá llamando por grupos de edad.
Además, garantizó que esta semana finalizará la vacunación de todo el personal de la comunidad educativa.
Sobre la posible relajación de las restricciones que están vigor, Puig admitió que «las noticias que llegan son muy negativas» y dijo que se van a vivir días complicados porque la Semana Santa favorece «la movilidad y el contacto.»
De todas formas, apuntó que «una vez superada la Semana Santa, pasado San Vicente, se verá con más optimismo alguna relajación de las medidas».
Por otra parte, el presidente aseguró que la Comunidad de Madrid es la menos indicada para quejarse por las ayudas del Gobierno, al ser la región que se beneficia de una mejor financiación «fruto del efecto capitalidad y también de una política fiscal de dumping».