Sin Laso y ¿con Tavares?
El técnico no estará ante el Olympiacos al ser suspendido por un partido
La derrota del Madrid ante el Anadolu Efes ha dejado al equipo blanco en una situación crítica. Al tropiezo se añadió las circunstancias que lo rodearon. La expulsión de Laso, los problemas físicos de Tavares, las molestias de Causeur... la primera secuela de lo sucedido ante los turcos es que el Madrid se jugará media temporada mañana ante el Olympiacos sin su entrenador. Laso ha sido suspendido por un partido y no podrá dirigir el choque ante los griegos, que llegan a Madrid ya eliminados. El Juez Independiente de la Euroliga considera que el técnico cometió una falta de respeto hacia los árbitros con sus reiteradas protestas, que le acarrearon dos técnicas y su expulsión en el minuto 29.
La suspensión de Laso se ha decretado en virtud del artículo 27.2.b del Código Disciplinario y mediante un expediente rápido, procedimiento que se utiliza cuando hay doble jornada en una semana. Contra esta resolución, el Real Madrid tiene derecho a presentar recurso ante el Comité de Apelación. Entre los planes del club no está recurrir la decisión. No tendría mucho sentido, ya que en caso de desestimarse la sanción llegaría la próxima semana en la decisiva visita a Estambul ante el Fenerbahçe o incluso, en caso de clasificación para cuartos, se podría aplicar en el primer partido de la eliminatoria.
Por eso en el club están más inquietos todavía por el estado físico de Edy Tavares. El equipo se limitó ayer a hacer sesión de recuperación. En el Madrid son moderadamente optimistas. La capacidad de sufrimiento de Tavares es de las más elevadas en la plantilla y en caso de que hubiera un problema grave lo normal es que ya se hubiera detectado. Hoy se realizarán pruebas más concretas, pero desde el club se confía en la presencia de pívot ante el Olympiacos, aunque no sea al máximo. Tavares es el jugador más determinante del equipo y eso en Europa todavía pesa más. El Madrid necesita ganar a los griegos, que llegan de ganar en Valencia, para seguir dependiendo de sí mismo en la última jornada y aspirar a algo más que la octava plaza que conllevaría una más que posible eliminatoria de cuartos de final ante el Barça.