El Consistorio de Valencia pide perdón a los niños lastimados en el Gulliver
Los chavales de un colegio sufren irritaciones el día de la reinauguración
El concejal de Ecología Urbana del Ayuntamiento de Valencia y vicealcalde, Sergi Campillo, pidió ayer disculpas en nombre del Ayuntamiento a los padres y a los niños que sufrieron diversas irritaciones después de tirarse por los distintos toboganes del parque Gulliver el pasado lunes, día en el que se reabría al público después del paréntesis de un año de la pandemia.
Como ya informó LA RAZÓN, diversos niños de un colegio sufrieron escozor e irritaciones después de disfrutar de los toboganes del Gulliver, por lo que Campillo ha ordenado una investigación que detecte qué fue lo que provocó tal reacción cutánea.
Hasta que se sepa, el parque permanecerá cerrado.
Campillo reconoció que el Gulliver era un parque con una características especiales: «todos nos hemos roto el pantalón alguna vez al tirarnos por él», pero la reacción de ayer fue generalizada lo que determinó que se volviera a cerrar.
El concejal habló ayer con el director del colegio cuyos alumnos fueron al parque el lunes y éste le confirmó que estaban todos bien y de hecho habían acudido con normalidad al centro.
Campillo se comprometió a reunirse con los padres de los niños afectados para trasladarles las disculpas del Consistorio, pero lo hará cuando se sepa qué fue lo que realmente provocó las irritaciones a los niños. Dijo que aventurar una hipótesis sería arriesgado.