Fuenlabrada, hebilla del cinturón azul

El «cinturón rojo» de Madrid, la esperanza de la izquierda en su afán movilizador de su nicho de votantes, se tiñó de azul el pasado domingo. El aumento de la participación en estos barrios obreros no ha tenido su reflejo en una victoria del PSOE, sino del PP. Los populares han sacando más de 13 puntos al PSOE, segunda fuerza en una ciudad icónica, en la que había logrado imponerse en todas las elecciones desde que se instaurara la democracia.

El PP duplicó sus resultados de 2019, logrando 37.691 votos, 26.881 más, y el 35,95% de los sufragios. Sin embargo, en términos generales los tres partidos de la izquierda (PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos) se imponen en votos –51.516– a los de la derecha, PP y Vox suman 48.265.

Esta no es la única ciudad tradicionalmente socialista que se ha rendido al PP, también se han teñido de azul Getafe, Alcorcón o Ribas y bastiones tradicionales de la izquierda en el sur de la capital como Puente de Vallecas, Villa de Vallecas, Usera, Centro, Carabanchel, Vicálvaro, Villaverde o Moratalaz. El hecho diferencial de Ayuso no solo es que se haya impuesto en estos feudos, sino que lo haya hecho, incluso, por más diferencia respecto al PSOE que la que lograra Esperanza Aguirre en los comicios de 2011, que marcaron el máximo de escaños autonómicos jamás logrados por el Partido Popular en Madrid.