Baleares planea volver a imponer el uso del cubrebocas al aire libre
El Ejecutivo autonómico busca reducir los ingresos en UCI y mantener el turismo
La vertiginosa velocidad que ha experimentado el incremento de los contagios está forzando a las comunidades a activar medidas de contención que hace apenas un mes parecían inimaginables, cuando la incidencia se encontraba en los niveles más bajos de toda la pandemia. Entre ellas figuran los toques de queda selectivos en zonas de alta incidencia de infecciones, la limitación de aforos en la hostelería y otros locales de ocio... y la vuelta de las mascarillas en los exteriores. La primera comunidad que se ha planteado recuperarlas apenas 24 días después de que el Gobierno, a través del Ministerio de Sanidad, decidiera indultarlas y suprimir su obligatoriedad al aire libre es Baleares, territorio regido por el mismo partido que sustenta al Ejecutivo Central.
Con una incidencia acumulada superior a los 500 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días –no es el peor territorio en este sentido–, y con la temporada turística en situación de alto riesgo pese a la llegada de viajeros británicos, el Gobierno autonómico debatió ayer la posibilidad de imponerlas de nuevo, con el fin de que sean otra vez obligatorias a partir del próximo fin de semana. Esta medida supondría un reconocimiento implícito de que la medida se tomó con una mayor rapidez de la debida y sin atender a la situación epidemiológica que podía producirse con un porcentaje de vacunación aún lejano con respecto a la ansiada inmunidad de rebaño. Numerosos especialistas especialistas apuntan ya que para alcanzarla no bastará con que el 70% de la población esté inmunizada con las dos dosis de Pfizer, Moderna o AstraZeneca, o con el suero de Janssen, sino que el porcejaje debería elevarse hasta el 85% o o 90% por culpa de la variante Delta del virus SARS-CoV-2, causante de la pandemia.
El Consell de Govern de Baleares acordó ayer trasladar un paquete de medidas a la mesa de diálogo social, en la que están presentes los agentes sociales, entre las que figura precisamente el retorno de los protectores buconsales. La idea del Ejecutivo autonómico era ayer convocar para hoy otro Consell de Govern extraordinario para proceder a la aprobación definitiva de este paquete. El objetivo es volver a contener el virus con el mantenimiento de las actividades económicas en un momento especialmente importante para las islas como destino turístico de miles de personas tanto españolas españolas como extranjeras. Una de las dificultades de volver a establecer esta obligatoriedad es que el levantamiento de la misma se produjo a través de un decreto del Gobierno, aunque habrá que esperar al encaje juridico que se e daría por parte de las autoridades autonómicas.
Hasta el pasado viernes, los hospitales baleares mantenían ingresados a 144 enfermos de Covid-19, lo que suponía un porcentaje de ocupación del 4,38%. Sin embargo, la tasa de ocupación de las unides de cuidados intensivos (UCI) u otros servicios análogos por parte de pacientes de coronavirus era la segunda más alta de España, sólo por detrás de la registrada en Cataluña. En concreto, era de un 11,27%, al contabilizar a 31 personas en estado crítico, según los datos del Centro de Coordinación de Alertas.