Puig pide que Madrid compense al resto de regiones por sus privilegios
El presidente valenciano plantea que el Día de la Hispanidad se celebre cada año en una ciudad distinta
El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, propuso ayer un nuevo mecanismo fiscal para que la comunidad autónoma de Madrid compense al resto de España por sus beneficios y «privilegios». Según Puig, el economista Paul Collier lleva años analizando las ventajas de las capitales y plantea una «aportación de los más beneficiados en las metrópolis para compartir con todos».
Este plus de riqueza, explicó el presidente, no se genera por azar, sino por recibir una serie de privilegios. «La filosofía es sencilla, si hay apoyo y privilegio, debe haber contraprestación».
El presidente valenciano realizó esta propuesta durante su
Considera el «procés» catalán una «década perdida» para esta autonomía y respalda el «camino de Sánchez»
intervención en los Desayunos de Europa Press en Madrid. Allí señaló que llevará esta medida al Comité de Expertos para la reforma fiscal, de manera que la tengan en cuenta y busquen la vía más acertada para llevar a cabo esta compensación. Preguntado por si se podría tratar de un nuevo impuesto para las rentas altas ubicadas en Madrid, el presidente Puig indicó que podría ser una opción, aunque no quiso «improvisar».
Habló de un «‘procés’ invisible de Madrid, el ‘procés’ de una capital que no tiene en cuenta las consecuencias de sus decisiones para el resto del país».
Ximo Puig realizó durante su intervención un repaso por los que considera los cinco principales desafíos para España en este momento: el independentismo catalán; el «centralismo ineficiente» de Madrid; la financiación autonómica «injusta»; la «España invisible» y la despoblación.
Para cada uno de estas desafíos planteó una serie de propuestas, entre las cuales se encuentra que el el 12 de octubre (Día de la Hispanidad) fiesta nacional en España, se celebre cada año en una ciudad del país, una manera de acabar con la España invisible.
Con respecto al independentismo catalán, resumió como «década perdida» el llamado ‘procés’ y lamentó que Cataluña «ha pasado de ser el impulsor de la modernización, a la parálisis». En este sentido, señaló que respalda «el camino que está explorando el presidente Sanchez, por convicción y por pragmatismo. Los indultos son una decisión valiente y sensata».
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, propuso ayer un impuesto, u otra «herramienta» de aportación, específico para las rentas altas de la Comunidad de Madrid que compensen los beneficios de la capitalidad frente a otros territorios. Puig pretende así que la región madrileña equilibre al resto de España por sus beneficios y «privilegios». Según el presidente valenciano, el economista Paul Collier lleva años analizando las ventajas de las capitales y plantea una «aportación de los más beneficiados en las metrópolis para compartir con todos». «La filosofía es sencilla, si hay apoyo y privilegio, debe haber contraprestación», matizó Puig.
El presidente valenciano señaló que llevará esta propuesta –que realizó durante su intervención en los Desayunos de Europa Press en Madrid– al Comité de Expertos para la reforma fiscal. Preguntado por si se podría tratar de un nuevo impuesto para las rentas altas ubicadas en Madrid, el presidente Puig indicó que podría ser una opción, aunque no quiso «improvisar». Para justificar esta idea señaló que las rentas más altas en la Comunidad de Madrid se benefician de unas rebajas fiscales que suman 4.453 millones de euros «gracias a las ventajas de la capitalidad, que concentra actividades públicas y privadas y que permite hacer ‘dumping’ fiscal». Se refirió a un «‘procés’ invisible de Madrid, el ‘procés’ de una capital que no tiene en cuenta las consecuencias de sus decisiones para el resto del país».
En el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso recibieron la propuesta de Puig sin demasiada sorpresa. Fuentes de Sol enmarcan las declaraciones del presidente valenciano en la estrategia del PSOE de atacar a Madrid desde todos los frentes posibles y desde todas las administraciones. El portavoz del Ejecutivo madrileño, Enrique Ossorio, reconoció a LA RAZÓN que el planteamiento de Puig es un «despropósito» e instó al tripartito de la Comunidad Valenciana a no culpar a otros territorios de sus errores: «Si quiere recaudar más y mejorar la situación de los valencianos, lo que tiene que hacer es imitarnos. Se lo hemos explicado cómo lo hacemos en Madrid a delegaciones que vienen de otros países y podemos explicárselo al señor Puig.
A juicio de Ossorio, el trasfondo de todo esto es que las políticas de Madrid «ponen en cuestión la política del PSOE», contrarias a un «gasto eficiente» al fomentar el «gasto por el gasto».
En el Gobierno de Ayuso tienen claro que precisamente la «batalla fiscal» será uno de los motivos de fricción con Moncloa en el próximo curso político. En concreto, los planes del Gobierno de Pedro Sánchez de llevar a cabo su plan de armonización fiscal que, en la práctica, supone la subida de algunos impuestos en Madrid.
Para trata de evitar en la medida de lo posible este escenario, el Ejecutivo madrileño dará forma a una ley de autonomía fiscal y aprobará la bajada de medio punto en el tramo autonómico del IRPF para se aplique en la campaña de la renta de 2022. Si finalmente la armonización de Moncloa cristalizara, la intención de Ayuso es la de acudir al Tribunal Constitucional.
El presidente valenciano plantea que el Día de la Hispanidad se celebre cada año en una ciudad distinta