La Razón (Madrid)

EL VIAJE INTERMINAB­LE

DESPUÉS DEL LARGO VIAJE A PAMPLONA, EL MADRID DURMIÓ POR TERCERA ANOCHE ALLÍ. VA A MÁLAGA DIRECTAMEN­TE PARA LA SUPERCOPA (EL JUEVES JUEGA CONTRA EL ATHLETIC). EL ENFADO DE LA ENTIDAD ES MAYÚSCULO POR CÓMO SE HAN HECHO LAS COSAS

- JOSÉ AGUADO

¿ CuándoCuán­do va a ser el siguiente entrenamie­nto del Real Madrid? Aún está por ver si esta tarde o ya mañana. ¿Dónde va a ser ese entrenamie­nto? Aún está por determinar. ¿Tras dejar su casa el viernes, cuándo van a volver los futbolista­s y el resto de la expedición a su casa? Nadie tiene una respuesta segura para eso.

Ése es el presente del Real Madrid estos días, obligado a un viaje que se supo cuándo empezó, pero que por ahora no tiene fin y del que surgen un montón de preguntas a las que nadie puede, aunque quiere, dar respuesta. El conjunto blanco tuvo que partir el viernes ya por la noche, tuvo que jugar el sábado por la noche en un campo helado y esta mañana se tiene que marchar a Málaga sin pasar por la capital para preparar ya la Supercopa. El jueves disputa la semifinal contra el Athletic Club y como el miércoles ya debe estar allí, ha decidido llevar a cabo lo más sencillo y no pasar por la capital. Uno de los planes que se maneja es volver a Madrid después del encuentro del jueves (aunque si se gana habría que regresar el sábado).

Anoche la expedición durmió por tercera vez en Navarra, mientras intentaba resolver todo lo que aún estaba por resolver en este inesperado cambio de planes.

El enfado del club es inmenso porque considera que todo se hizo mal desde el principio y desde entonces se han ido poniendo parches a la situación sin mejorarla en exceso. Había que buscar soluciones porque viajar en avión a Madrid no se podía debido a la situación de Barajas. Según la Cope, LaLiga le propuso al Madrid un viaje en avión a Valladolid y luego un autobús a Madrid por carretera.

Es decir, un retorno largo y aún incierto por el estado de las carreteras. Ahora mismo, el equipo de Zidane es el equipo de La Liga masculina al que más le ha afectado el temporal y al que más incomodida­des le está creando. Ni siquiera cuando se creía que ya había acabado la odisea, con el triste empate con el que terminó el encuentro contra Osasuna, se habían terminado de verdad las molestias. El viaje interminab­le era una película emocionant­e y llena de aventuras, en el viaje interminab­le del Madrid sólo hay pérdidas de tiempo, aburrimien­to por la espera y una prueba constante a los límites de la paciencia.

Los jugadores no pueden volver a su casa con sus familias para descansar y airearse tras todo el estrés y cansancio acumulado acumulado por el largo viaje a Pamplona y están obligados a hacer una concentrac­ión como las que antes llevaban a cabo los equipos: una semana o más separados de su familia y de su rutina, concentrad­os sólo en el fútbol, con el resto de los compañeros. Era habitual para crear equipo o para superar malos momentos, en el Madrid se realiza por el cúmulo de dos circunstan­cias: el temporal y las malas decisiones, piensan en el club blanco, de LaLiga. «Que esto iba a pasar se sabía desde hace tiempo, pero nos obligaron a despegar en un aeropuerto congelado», explicaba Courtois después del encuentro. «Tienen que pensar que los futbolista­s somos seres humanos, no un espectácul­o. Hemos venido al estadio con la carretera llena de nieve. Hay que mirar por la seguridad de la gente. También tenemos familias». No sabía aún que iba tardar mucho más en ver a su familia.

Todo empezó en el vuelo en Barajas, que tardó tres horas en salir y lo hizo cuando el aeropuerto ya estaba cerrado para las llegadas, que no para las salidas: «El aeropuerto estaba operativo, pero ofrecía muchas dificultad­es para establecer vuelos. Pero el avión salió en tiempo, salió antes de la suspensión definitiva», aseguró el ministro José Luis Ábalos. «La última palabra es la decisión del piloto, que entendía que se daban las condicione­s de seguridad para proceder al despegue». El vuelo fue lo de menos. El problema fue estar encerrados como ratones, como lo describían en el club, en el avión para poder cumplir con el viaje y con el mandato de disputar el encuentro. Una situación así pone de los nervios y cansa más que después el corto viaje.

La decisión es del piloto, que entendía que se daban las condicione­s de seguridad para ir a Pamplona»

José Luis Ábalos

Tienen que pensar que los futbolista­s somos seres humanos, no un espectácul­o. También tenemos familia»

Courtois

Tengo que hablar claro del partido. Tendría que haberse suspendido el choque contra Osasuna, claro que sí»

Zidane

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