España ha perdido ya 55.300 millones en ingresos por la falta de turismo internacional
El sector turístico acumula una crisis de proporciones bíblicas que se alarga en el tiempo desde el pasado mes de marzo. Y las cifras así lo avalan. La actividad turística internacional en España se desplomó durante el pasado año más de un 77% frente al año anterior, registrando una cifra de llegadas de 18.957.856 turistas, lo que supone 64,57 millones menos. En términos estrictamente económicos, esa caída supuso la pérdida del 6,9% del PIB, al pasar la aportación del sector a la riqueza nacional del 12,4% al 5,5%, 6,9 puntos por debajo respecto al año anterior. Según los datos del Banco de España de la balanza de pagos, los ingresos por turismo alcanzaron la cifra de 15.518 millones de euros (hasta noviembre), un 76,9% menos que en 2019. La previsión, a falta de cerrar las estadísticas del mes de diciembre, es que el cierre del año podría registrar ingresos por valor de 15.868 millones de euros, lo que supondría 55.332 millones menos y aumentar el desplome hasta el 77,7%. Todo ello afectado porque la demanda internacional del mercado español sufrió una caída del 77,3%, registrando 64,57 millones de turistas menos que en 2019. En este sentido, la demanda hotelera, tanto la de no residentes como la de residentes, sufrió desplomes nunca vistos. La ausencia de turistas internacionales registró una pérdida en el último año de 182,47 millones en pernoctaciones hoteleras, lo que significa un 81,7% menos. En el caso de los residentes en España, el sector sufrió una caída menos pronunciada que la del mercado internacional, pero no menos histórica, -57, 6%.