Grietas en el muro
El Atlético ha recibido goles en ocho partidos seguidos. Ayer, no remató a puerta. «No nos faltó no ser valientes», dice el Cholo
Simeone: «Si me dicen en septiembre que perdemos la ida, pero que estamos primeros en LaLiga, lo firmo»
El Atlético es el Atlético si cierra su portería. Después, que pase lo que pase, pero la esencia, lo que hace del equipo de Simeone un equipo temible es defender como nadie, como si no hubiera otra cosa más importante en la vida. Sin embargo, en el momento más importante de la temporada se le ha olvidado la brújula: «No es una crisis, es un momento diferente», decía Oblak, intentando quitar importancia a que lo que antes iba bien, ahora se está torciendo: «Pero es normal, los goles que no entran, nos marcan de chilena, el otro día de rebote... Es complicado, pero en situaciones complicadas se ve el equipo y estoy seguro de que tenemos un grupo fuerte».
Debe ser fuerte porque tiene que remontar en el partido de vuelta de los octavos de Champions y siente en LaLiga el aliento de un Real Madrid hambriento y en línea ascendente. Justo lo contrario que los rojiblancos. Llevan toda la temporada huyendo como de la peste de su papel de favoritos en cualquier competición, como si eso les diera gafe. Tras la derrota de ayer en la ida de los octavos de la máxima competición continental y en la que hacían de local en un campo extraño, lo han conseguido: ya no son favoritos para pasar a los cuartos de final. En los últimos ocho encuentros han recibido ocho goles. Simeone quiso ver el lado bueno: «Si me dicen en septiembre que perdemos la ida, pero que estamos primeros en LaLiga, lo firmo», dijo el entrenador argentino, responsable del partido defensivo de su equipo. «No creo que nos haya faltado ser valientes», insistió. Pero lo cierto es que el Atlético terminó el encuentro sin rematar a portería. «Buscábamos tener orden y aprovechar nuestro talento», continuó el entrenador rojiblanco acerca de cómo planteó el encuentro.
El dominio fue del Chelsea de Tuchel, aunque es verdad que durante gran parte del partido se vio impotente ante los hombres que sumaba el Atlético atrás. El técnico rojiblanco suele apostar por lo más conservador en los días en los que está todo en juego y tantas veces le ha salido que no se le discute. Él quería llegar a la vuelta sin goles en contra, lo de los goles a favor era un asunto menor. Fue dice, una cuestión de detalles: «Ha habido muy pocas ocasiones para ambos equipos y ellos aprovecharon la de Giroud», explicó. En el otro lado Joao Félix se aburrió y fue incapaz de hacer nada peligroso después del tanto del conjunto inglés.
Fue un gol con suspense, porque el VAR tardó mucho en adivinar quién era el futbolista que le daba el balón a Giroud. Fue Hermoso el que tocó la pelota. El mejor pase de un rojiblanco en un área.