Las pensiones se revalorizarán aunque el IPC sea negativo
El Ministerio de Seguridad Social, José Luis Escrivá, se comprometió ayer con los agentes sociales a subir las pensiones conforme al Índice de Precios de Consumo (IPC) sin que haya compensaciones por inflación negativa en los tres años siguientes. Así lo señalaron fuentes del diálogo social tras terminarse el encuentro de la mesa de negociación de la reforma de pensiones.
La semana pasada en la Comisión del Pacto de Toledo, Escrivá anunció que el Gobierno planea revalorizar las pensiones con el IPC del año anterior y, si la inflación fuera finalmente negativa, se ajustaría en los tres años siguientes. Pero esta medida se ha encontrado con la fuerte oposición de las centrales sindicales, que ayer lograron que se diera marcha atrás.
El secretario de políticas públicas y protección social de CC OO, Carlos Bravo, ha reiterado que los sindicatos han sido «muy firmes» en esta materia y el Gobierno finalmente ha renunciado al planteamiento, por lo que «no se produciría esa compensación en los años sucesivos. Era un cambio imprescindible para avanzar en la negociación, pero aún es limitado». El sindicalista ve «preciso resolver bastantes materias más que no permiten hablar todavía de acuerdo».
Por su parte, UGT celebró que se haya «desatascado» la negociación. No obstante reiteró que se mantiene en la idea de derogar la reforma de pensiones de 2013 y en que se sigan las recomendaciones del Pacto de Toledo, porque «esa es la senda para el acuerdo definitivo».
Hasta ahora, la propuesta del ministro consistía en revalorizar las pensiones en función del IPC del año anterior y, para evitar reducciones en la prestación durante los años de inflación negativa, compensar las tasas de esos años a lo largo de los tres ejercicios siguientes. Ya no será así tras la reunión de ayer.