La guerra del PSOE andaluz.
tivar a Vox en la lucha por el voto, el PP andaluz se inclina a día de hoy por la segunda opción. Desde las organizaciones territoriales del PP, no sólo la andaluza, se ve además con otro enfoque la campaña de Madrid y las consecuencias del resultado de las elecciones. Consideran que la candidata, Isabel Díaz Ayuso, se mueve en un contexto social, político y electoral que no tiene nada que ver con la radiografía del granero popular en el conjunto del territorio nacional. Y por esto tampoco creen que la victoria de Ayuso pueda proyectarse en el resto de comunidades ni sirva como impulso para el partido fuera de Madrid. Aunque sí reconocen que mantener el Gobierno de Madrid da tiempo y oxígeno a Pablo Casado después del batacazo en las últimas elecciones autonómicas catalanas.
Mientras en Madrid se espera que las elecciones abran una nueva etapa de obligada relación entre PP y Vox, y habrá que ver en qué condiciones, en Andalucía PP y Ciudadanos han cerrado un pacto fiscal con los de Abascal. La reforma la registrarán los tres partidos de forma conjunta en el Parlamento de Andalucía, e implica una bajada de impuestos para beneficiar, sobre todo, a las empresas.
Vox se apropió del acuerdo y fue el primero en anunciarlo a través de un comunicado, por lo que el pacto nace con un primer punto de desacuerdo respecto al origen y principal promotor de la iniciativa. Pero el partido de Abascal jugaba con la ventaja de que sus votos son imprescindibles para que salga adelante esta reforma fiscal.
El PP andaluz ya pactó con Vox la investidura de Juan Manuel Moreno. Y los Presupuestos de los tres últimos ejercicios. La relación del PP con la parte naranja del Gobierno también es fluida, a diferencia de lo que ocurría en el Ejecutivo de Madrid. Moreno mantiene una estrecha confianza con el vicepresidente, Juan Marín (Cs), hasta el punto de que dentro del PP no disgusta la idea de que en el futuro pudiera entrar dentro de sus listas.
Marín ha cerrado filas con Arrimadas tras la crisis abierta por la moción de censura en Murcia. Pero las elecciones del 4-M determinarán el futuro inmediato de los naranjas y su capacidad de seguir conservando el resto de su infraestructura territorial.