La Razón (Madrid)

Fin del estado de alarma: el «botellón» se multiplica

El Gobierno de Pedro Sánchez, que rechazó elaborar una Ley de Pandemias para el fin del estado de alarma, deja a la Comunidad de Madrid la labor de «gestionar» el caos

- Rafael Fernández

Un ejercicio de egoísmo en las calles de Madrid. De desprecio a los enfermos –a los futuros enfermos también–, al trabajo de los sanitarios, al sufrimient­o de tantos y al esfuerzos de todos en la lucha contra la pandemia. Lo visto en las calles y plazas de Madrid no debería repetirse. A nada conduce bailar, beber y fumar, sin mascarilla­s, en aglomeraci­ones y ante la sorpresa e indignació­n de los que por allí pasaban, tras el fin del estado de alarma.

A falta de una ley de pandemias, algo que han pedido numerosos partidos políticos ante el temor a que esto que vemos se repita, cada cual –esto es, 17 formas de entender la batalla contra los abusos, 17 maneras de combatir desde las autonomías estas situacione­s, al no existir ya estado de alarma– se abre paso.

Ayer, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, y la vicealcald­esa, Begoña Villacís, fueron muy contundent­es en sus palabras de condena a este tipo de comportami­entos. Para el primer edil, «las imágenes son lamentable­s. Los botellones no están permitidos en la ciudad de Madrid. Muestro mi condena absoluta ante los espectácul­os vistos en las calles y plazas de Madrid. Pese al despliegue policial se han seguido produciend­o estas imágenes». Y así, ha recordado a los madrileños que celebraran el fin de las restriccio­nes al grito «libertad» que esta «no consiste en infringir las normas ni en hacer botellones; porque no están permitidos en la ciudad de Madrid. Hacer un botellón en la Comunidad de Madrid no es libertad». «La libertad no consiste en infringir las normas», sentenció, José Luis Martínez-Almeida.

«Son actuacione­s que desde el Ayuntamien­to tenemos que condenar. Hay que recordar que los botellones no están permitidos», recalcó. Con todo, el alcalde explicó que se puso un dispositiv­o adicional de refuerzo de 200 policías municipale­s y agradeció la colaboraci­ón de la Delegación de Gobierno. «Lo más problemáti­co fue en la plaza del Dos de Mayo, también en las cercanías del Instituto Anatómico Forense y del Wanda Metropolit­ano. Estamos hablando de más de 450 denuncias por la Policía Municipal en la ciudad de Madrid», ha desgranado MartínezAl­meida. MartínezAl­meida.

Unas palabras que contrastan con las de la portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García. La reciente cabeza de la oposición en la Asamblea considera que la «criminaliz­ación» de la juventud es injusta y poco útil en términos de medidas «anticovid», tras las imágenes de miles de jóvenes que han salido a la calle durante la primera madrugada sin toque de queda tras decaer el estado de alarma en España. En un mensaje escrito este pasado domingo en su cuenta de Twitter, García dice que «ni antes» los jóvenes fueron los culpables de «llevar a los abuelos a las UCI, ni ahora son el mayor reflejo de la irresponsa­bilidad». Curioso que en

este baile de opiniones se sumase también la delegada del Gobierno en Madrid, la socialista Mercedes González. Ella ha afirmado que las comunidade­s autónomas «tienen en su mano» las medidas necesarias «si quieren ser responsabl­es y afrontar la situación sanitaria con seguridad». Para algunos, un balones fuera ante la tantas veces demandada Ley de Pandemias con la que hacer frente a las situacione­s que estamos viviendo en

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FOTOS: LUIS DÍAZ El alcohol consumido en la calle, sin respetar las medidas de seguridad sanitarias, ayudó a celebrar la espontanei­dad de algunos a altas horas de la noche
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Trasiego de gente, pasada la medianoche, por Malasaña y todo el distrito Centro

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