INDICADORES ADELANTADOS
LoLo importante en economía es la tendencia. También en el terreno electoral. Y las últimas elecciones en Madrid constituyen un indicador adelantado de lo que serán las próximas generales. Azaña hablaba en los años 30 del voto adelantado de las ciudades respecto a los «burgos podridos» del entorno rural, pero en Madrid la derrota del Gobierno ha sido en todas las zonas, urbanas y rurales, y en todas las franjas de edad. Tras nuestra caída económica record de los últimos doce meses, la propia Comisión nos adelanta aumentos en PIB del 5,9% y 6,8% en 2021 y 2022. Incluso el registro de creación de empresas lleva dos meses de avances interanuales: un 4,2% solo en abril. Es decir, asistiremos a una lógica etapa de recuperación debido a la demanda embalsada, apoyada en la vacunación masiva, la aceleración en la apertura comercial, la llegada del verano, y luego la calculada llegada de los fondos europeos.
Pero el presidente está desacreditado. Aunque todavía le veremos transitando por las elecciones andaluzas de 2022, y las autonómicas y municipales de mayo 2023. E intentará aguantar hasta finalizar la presidencia española de la UE en el segundo semestre del mismísimo 2023. De momento, queda un «déjà vu» de situaciones anteriores. E igual que en las previas a 1996 y 2011 que llevaron a la Moncloa a Aznar y Rajoy, acabará ocurriendo con Casado. Si acierta –como dirían en Francia– con el necesario «rassemblement».
«En Madrid, la derrota del Gobierno ha sido en todas las zonas, urbanas y rurales»