Ecos de Stalingrado en la cruda batalla de Bajmut
► El Ejército ucraniano resiste para convertir esta pequeña ciudad de Donetsk en la palanca de su esperada contraofensiva
«El plan para ‘conquistar Ucrania en tres días’ se transformó en intentos de nueve meses alrededor de una pequeña ciudad», subrayó ayer en una entrevista el segundo comandante militar de Ucrania, Oleksandr Syrskyi, en referencia a la cruenta batalla de Bajmut, en Donetsk. Bajmut, junto con la serie de ciudades de tamaño pequeño a mediano de la región, se han convertido en una tierra destruida, que recuerda las arenas de las batallas de la Primera y Segunda Guerra Mundial, con Rusia confiando en oleadas humanas de soldados, con el objetivo de agotar a defensas ucranianas y ahorrar en artillería y otros equipos.
Si bien aparentemente no tiene un valor estratégico particularmente alto en sí misma, la ciudad se ha convertido en un objetivo simbólico cada vez más importante para ambos lados. Primero, para los rusos, con el autoritario líder Putin, deseoso de mostrar al menos algo de éxito y su antiguo «chef», el oligarca Yevgeni Prigozhin, dispuesto a demostrar la superioridad de su ejército privado de mercenarios sobre las fuerzas regulares rusas.
Mientras que para los ucranianos, el presidente Volodimir Zelenski ya proclamó durante su visita a Estados Unidos en diciembre que «la lucha por Bajmut cambiará la trágica historia de nuestra guerra por la independencia y la libertad».
La realidad sobre el terreno es, de nuevo en palabras de Zelenski, que «cada centímetro de esa tierra está empapada en sangre; el rugir de los cañones suena cada hora». Ambos bandos, aunque discretos sobre sus bajas, sufren grandes pérdidas mientras que las tropas rusas aparentemente hacen un progreso constante, pero fallan una y otra vez para obtener el control de la ciudad.
Las tácticas de Rusia, naturalmente, condujeron a pérdidas medidas en centenares por día, con las fuerzas defensoras teniendo una ventaja y los oficiales de Rusia sin preocuparse por el destino de los miles de criminales reclutados y rusos recién movilizados.
Sin embargo, los defensores sufrieron la superioridad de Rusia en artillería y aviación y, probablemente, la incapacidad de dedicar más fuerzas frescas a la resistencia debido a la preparación en curso para la contraofensiva. Las notificaciones diarias de la muerte de los soldados ucranianos, tropas profesionales profesionales y civiles voluntarios o movilizados, han estado fluyendo sin parar.
La preocupación por las pérdidas sufridas por Ucrania ha llevado a muchos analistas y funcionarios del país y de su principal aliado, Estados Unidos, a cuestionar la continua defensa de la ciudad. Estos últimos expresaron su preocupación de que la defensa disminuya las posibilidades de éxito de la esperada contraofensiva, destinada a liberar los territorios ocupados por Rusia (alrededor del 19% del área del país).
Aun así, Ucrania parece estar firmemente atrincherada con líderes políticos y militares que hablan al unísono sobre la importancia de Bajmut. El general Syrskyi subrayó el jueves que las tropas ucranianas «están frenando el avance del enemigo» en Bajmut. Además, dijo, «estamos infligiendo pérdidas significativas al enemigo al destruir sus unidades, armas y equipos militares más profesionales».
Según Syrskyi, existen varias razones importantes para mantener la defensa de Bajmut, a pesar de que gran parte de la ciudad ya está bajo control ruso. La ciudad se ha
Las tropas rusas tienen ventaja en el frente por su superioridad en artillería y aviación
convertido en una parte importante de la salvaguarda de la región, ayudando a garantizar su estabilidad y evitando que los rusos pongan en peligro a las fuerzas de Ucrania en las áreas vecinas del frente. Llamó a Bajmut «una fortaleza natural», rodeada de ríos y ubicada en colinas, lo que facilita su defensa. Asaltar el área urbana presenta un tipo diferente de desafío para las fuerzas rusas, más acostumbradas a la guerra en entornos naturales.
Syrskyi indicó que Rusia comparó la batalla por Bajmut con Stalingrado, ya que la ciudad sirve como clave para un mayor avance hacia los centros regionales de Kramatorsk y Sloviansk. Los paralelismos históricos a menudo no son útiles, sin embargo, el analista ucraniano Petro Chernyk sugirió que es más probable que Bajmut produzca un Stalingrado ucraniano ya que la victoria allí podría señalar el comienzo de la gran contraofensiva de Ucrania al igual que la victoria soviética en 1943 precedió a un gran empuje para repeler a las fuerzas nazis del país invadido.
¿Qué ha llevado a Holcim a poner en marcha su estrategia de descarbonización?
Es un reflejo de nuestro propósito, construir progreso para las personas y el planeta, y de nuestro objetivo de ser neutros en carbono en 2050. En Holcim estamos a la vanguardia de la descarbonización de edificios a lo largo de todo su ciclo de vida para construir un futuro de cero emisiones netas que funcione para las personas y el planeta. Queremos liderar la descarbonización del sector de la construcción.
¿La estrategia en España está ligada con la de la compañía a nivel global?
Efectivamente, nuestra estrategia “Acelerar el crecimiento verde” es una estrategia global. En Holcim España estamos alineados con la visión de la compañía de ser líderes en soluciones de construcción innovadoras y sostenibles. Esta estrategia nos sitúa en el buen camino para convertirnos en una empresa ‘Net Zero’ y además con un enfoque basado en la ciencia. En este sentido, Holcim ha sido la primera empresa del sector cuyos objetivos intermedios para 2030 y de emisiones netas cero para 2050 fueron validados por la iniciativa Science Based Targets (SBTi) para todos los alcances.
¿Cuáles son las acciones que se han impulsado para poner en práctica este proceso?
Nuestra estrategia de descarbonización tiene una visión holística: en primer lugar, descarbonizar Holcim, con operaciones verdes, desde energía renovable y movilidad, hasta formulación de productos sostenibles. E incluso ir un paso más allá mediante tecnologías de última generación como CCUS (Captura, Uso y Almacenamiento de CO2), e incorporando la estrategia de naturaleza para lograr una contribución neta positiva.
En segundo lugar, construir mejor con menos, a través de la descarbonización de la construcción con nuestros materiales bajos en carbono, ECOPact y ECOPlanet, nuestra gama de hormigones y cementos sostenibles capaces de reducir la huella de carbono entre un 30% y un 70% respecto a sus versiones tradicionales.
En esta visión también tenemos en cuenta que los edificios sean más sostenibles en su uso para descarbonizar nuestras ciudades, con nuestra amplia gama de soluciones de morteros TECTOR, que contribuyen al aislamiento, impulsando la eficiencia energética y la rehabilitación sostenible.
Y, por último, promovemos la economía circular, reutilizando los residuos de la construcción y demolición nuevamente en nuestras ciudades. Construir lo nuevo a partir de lo viejo, con la reciente gama de productos ECOCycle.
Y apostando por la eficiencia…
Se espera que el creciente enfoque en el carbono embebido por m2 de construcción promueva que el mercado gire en torno a una construcción más eficiente en carbono. Desde Holcim apoyaremos esta transición con nuestros productos bajos en carbono y con sistemas de diseño inteligente como la impresión 3D que posibilitan construir mejor con menos.
En lo que a nuestras operaciones se refiere, utilizaremos combustibles alternativos en sustitución de los combustibles fósiles, a la vez que incrementaremos nuestra tasa de sustitución térmica y fomentaremos el uso de energías renovables.
¿En qué consisten las tecnologías de captura, uso y almacenamiento de CO2 que emplean?
En nuestra fábrica de Carboneras (Almería) estamos diseñando la que será la primera planta de captura de CO2 en una fábrica de cemento en España. Este pionero proyecto tiene como objetivo capturar el CO2 emitido en el proceso de producción del cemento para transformarlo y reutilizarlo localmente como parte del proceso de fertilización carbónica en los invernaderos, lo que permitirá mejorar la eficiencia y productividad de los cultivos. La tecnología de CCUS (Carbon Capture, Utilization and Storage) es fundamental para la transición hacia un futuro de bajas emisiones, en sectores que, como el cementero, contienen emisiones asociadas a su propio proceso productivo y que no pueden evitarse.
¿Qué va a suponer para Holcim la futura planta de captura en la fábrica de Carboneras?
Reforzará aún más nuestro liderazgo en la descarbonización y crecimiento sostenible, generará sinergias con otros sectores como el tecnológico, y beneficiará a la comunidad local, tanto en términos de empleo como en la contribución de la mejora de la productividad de los cultivos de Almería.
¿Qué valor añadido aportan ECOPact y ECOPlanet en este contexto de descarbonización?
ECOPact y ECOPlanet son nuestras soluciones de construcción sostenible bajos en carbono: hormigón y cemento sostenibles, respectivamente. Ambos permiten reducir el contenido de CO2 entre el 30% y el 70% con respecto a los hormigones y cementos tradicionales. En el caso de ECOPact, se trata de la primera gama de hormigones con Declaración Ambiental de Producto (DAP) propia, lo que nos convierte en el único fabricante de hormigón en España en ofrecer una gama baja en carbono con DAP propia.
En el contexto de descarbonización en el que nos encontramos, ambas soluciones son perfectamente eficientes, sostenibles, versátiles y durables y permiten a nuestros clientes diferenciarse en el mercado nacional de la construcción verde. De hecho, nuestro compromiso de convertirnos en una compañía NetZero está presente en la esencia de nuestras tres líneas de negocio: cemento, hormigón y mortero.
¿El futuro de la construcción pasa necesariamente por la sostenibilidad, la descarbonización y la economía circular?
Lo creemos firmemente. El camino del sector hacia la neutralidad en carbono en 2050 es claro. Nuestro mundo está creciendo. La población mundial está en aumento y se espera que en el año 2050 haya 10 mil millones de personas, con el 65% de ellas viviendo en ciudades. Por eso y para que nuestro crecimiento sea lo más sostenible posible, nuestra economía está pasando de ser lineal a circular, con la finalidad de conservar y recuperar los recursos naturales.
¿Cuáles son los retos de futuro de Holcim para los próximos años en esta materia?
Queremos hacer más y avanzar más rápido en la transición a un mundo de cero emisiones netas. Sólo este año nos proponemos reducir nuestras emisiones directas en más de un 30% en todas nuestras operaciones. Nos hemos comprometido a ganar la carrera hacia el cero neto en materia de descarbonización y en realizar una contribución positiva para la naturaleza.
En nuestro viaje hacia cero emisiones netas, nos centramos en cuatro palancas de acción clave para descarbonizar el entorno construido: hacer posible la construcción sostenible a escala, utilizando nuestras soluciones bajas en carbono ECOPact y ECOPlanet; impulsar la construcción circular para construir mejor con menos a partir del uso de residuos de construcción reciclados; desarrollar tecnologías de última generación como los sistemas CCUS que comentaba; y, por último, desarrollar tecnologías para que los edificios sean más inteligentes desde los cimientos hasta las azoteas y en todas las fases de su vida útil.
Holcim contará con la primera planta de captura de CO2 en una fábrica de cemento en España