El Gobierno baraja retrasar la reforma fiscal ante la falta de apoyo
► El pago de fondos europeos depende de este hito, por lo que podría pedir otra prórroga
Con el cuarto pago de los fondos europeos en el aire tras el chasco parlamentario de la reforma del subsidio de desempleo, ya se empiezan a vislumbrar problemas para hacer frente a las reformas comprometidas para el quinto pago. Pese a que el Gobierno asegura que España cumplirá «cuando toque» con la reforma fiscal comprometida con Bruselas en el marco del Plan de Recuperación, referente a ese quinto pago, fuentes gubernamentales reconocen que la inestabilidad política y la incertidumbre parlamentaria que afronta el Ejecutivo de coalición puede provocar que los objetivos marcados para cumplir con los siguientes hitos comprometidos tengan que retrasarse.
Y la reforma fiscal es uno de los hitos más destacados del quinto pago de los fondos europeos. Fuentes del Ministerio de Economía aseguran que «hay tiempo» para llevarla a cabo, por lo que «cuando llegue ese desembolso, por supuesto que España cumplirá en tiempo y forma cuando le toque». Pese a ello, el Gobierno no es ajeno a las dudas que ha generado en Bruselas la falta de apoyo parlamentario para llevar a cabo un reforma tan ambiciosa. Fuentes gubernamentales consultadas por LA RAZÓN aseguran que este toque de atención de la UE es sólo «algo habitual y se hace con todos los países», pero remarcan que el Gobierno sigue «trabajando en todas las reformas reformas y cumpliéndolas en consonancia con el calendario temporal del plan».
Sin embargo, las mismas fuentes confirmaron que son conscientes de la inestabilidad en la que se mueve en la actualidad el Gobierno, con varias citas electorales clave en el horizonte a corto plazo, entre las cuáles será fundamental el resultado de las urnas catalanas, porque del voto de las formaciones independentistas es clave para poder aprobar la comprometida reforma fiscal, que ahora mismo estaría en el alero con la limitada capacidad de voto actual del equipo de Gobierno en el Congreso. «Sería absurdo no asumir que la reforma fiscal requiere de una negociación ardua y complicada que puede retrasarse más allá de la fecha límite del quinto pago, por lo que no puede descartarse que se solicite una prórroga como se ha hecho con el cuarto».