Plan para reforzar la vacuna de la tosferina tras la subida de casos
► Los niños de 10 a 14 años son los más afectados por esta enfermedad, con el 60% de incidencia
Tras el parón impuesto por la pandemia, desde la segunda mitad de 2023 se está observando un incremento extraordinario de la incidencia de la tosferina en nuestro país, según informes del Centro Nacional de Epidemiología (CNE). Concretamente se han dado, hasta finales de la décima semana, 8.260 casos, lo que prácticamente cuadruplica los de todo 2023 (con 2.211 casos). Más de la mitad de esos contagios se han dado en Cataluña, sobre todo en la comarca del Vallés. Los más afectados por esta enfermedad endémica han sido los niños de 10 a 14 años, con el 60 % de la incidencia. Por este motivo, el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría( CAV-A E P) solicita reforzar el calendario vacunal infantil incluyendo una dosis adicional de vacuna frente a la tosferina de recuerdo antes de la adolescencia.
«El infradiagnóstico de la tosferina es usual, y no en todos los lugares se llevan a cabo los mismos protocolos diagnósticos, por lo que la incidencia real de esta enfermedad será muy probablemente, incluso mayor que la indicada por las cifras oficiales», aclaró la doctora Anna Gatell, presidenta de la Sociedad Catalana de Pediatría.
España no es un caso aislado. El incremento anómalo de casos de tosferina en Europa también se ha observado de manera inesperada en Dinamarca, Bélgica, la República Checa, Noruega, Suecia, Croacia y el Reino Unido.
La tosferina es una infección respiratoria causada por la bacteria Bordetella pertussis. Resulta muy contagiosa y se caracteriza por comenzar de manera similar a un catarro, seguido por una tos prolongada que, con frecuencia, se acompaña de una estridencia al inspirar. En los adolescentes y adultos jóvenes no suele repercutir gravedad, pero sí en los lactantes menores de 3-4 meses, que presentan una importante morbimortalidad. Para proteger sobre todo a los bebés, tal y como se puso ayer de manifiesto en las XV Jornadas de Inmunizaciones de la Asociación Española de Pediatría, que se celebran estos días en Gerona, debe ponerse el foco en los portadores asintomáticos. «Su papel en la trasmisión de la infección es poco conocido, pero se estima de grandísima importancia para controlar la enfermedad», explicó la pediatra.
Las vacunas que se usan en España desde 2007 para prevenir la tosferina suelen inocularse de los 2 meses de edad a los 6 años en cuatro dosis. La vacuna es inmunógena y efectiva, pero su protección decae notablemente en un plazo de 5 a 10 años y no actúa sobre la colonización nasofaríngea. El CAV-AEP propone 5 dosis con una más en la adolescencia.
La nueva dosis debería administrarse antes de la adolescencia
Nueva medida urgente
Además de monitorizar las coberturas vacunales en las distintas comunidades autónomas y de concienciar a la población para que se inmunice, desde el CAV-AEP se propone una nueva medida: revisar el calendario del Ministerio de Sanidad, incorporando la dosis de refuerzo de la adolescencia (solo la realiza actualmente Asturias) para cubrir esa pérdida de efectividad. Asimismo, en palabras de Gatell, «conviene reforzar la investigación de nuevas vacunas que salven esta clara limitación».