LAS CLAVES
Golpe a los autónomos
Ya lo venían anunciando las asociaciones de autónomos. «Los datos del cierre del año serán demoledores para los trabajadores por cuenta propia». Y así ha sido. El impacto de la pandemia en el mercado laboral en 2020 ha significado la primera subida del paro en siete años, tras seis consecutivos creando empleo. De esta pérdida, generalizada en todos los sectores y segmentos –y concentrada en los servicios, con 537.100 empleos menos, y la industria, 70.100–, destaca el mal comportamiento en el mercado del trabajador autónomo, que restó 19.800 emprendedores. Pero el dato más demoledor corresponde al número empleadores autónomos perdido el año pasado, casi 100.000, lo que confirma que este colectivo sigue siendo uno de los que más impacto está sufriendo con la pandemia y las restricciones y cierres que lleva aparejada. A esto hay que sumar que 350.000 trabajadores por cuenta propia continúan en cese de actividad, y que que muchos de ellos mantienen sus negocios cerrados y no saben si volverán a abrir.
Un paro juvenil desbordado
El desempleo entre los menores de 25 años aumentó en 2020 en 109.600 personas, hasta un total de 572.400, lo que elevó la tasa de paro juvenil al 40,13 % de la población activa, 9,62 puntos más respecto a la registrada en 2019. Si se compara la tasa de paro juvenil de cierre de 2020 con la registrada al finalizar otros ejercicios, la de 2020 es la más elevada desde el año 2016 (42,9%). Por su parte, el número de activos menores de 25 años disminuyó en 90.400 personas en 2020 (-6%). De los 3,71 millones de parados contabilizados en España al finalizar el año en el que se declaró la pandemia del Covid, el 15,4% son jóvenes menores de 25 años y el 38,1% son parados de larga duración (más de un año en el desempleo). Por regiones, las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta registraron las tasas más altas de paro juvenil, del 66,72 % y el 65,91 %, respectivamente, seguidas de Canarias, del 57,72 %. Por el contrario, Navarra fue la autonomía con la tasa más baja (20,63 %).
Cataluña, la peor parada
Casi todas las comunidades disminuyeron su ocupación, siendo Cataluña (137.600 ocupados menos), Canarias (112.800) y Madrid (107.100) las que reflejaron la mayores bajadas; en tanto que aumentaron el empleo durante 2020 Extremadura (5.500 más), Murcia (2.100) y La Rioja (400). Respecto al paro, el desempleo aumentó en 222.300 hombres y 305.600 mujeres y, sobre todo, en el grupo de edad de 25 a 54 años (con 387.100 parados más). El número de parados de larga duración se incrementó en 197.700 y el de aquellos que buscan su primer empleo, en 10.400. Por sectores, el desempleo apenas varió en la agricultura (500 parados más) y se incrementó en la construcción (7.900), en industria (31.900) y en servicios (279.500).