«O dan ayudas directas o cierran miles de pymes»
Cepyme teme que el 10% sea ya inviable y estima en 1.100 millones las pérdidas semanales si hay otro confinamiento
«Si no se ayuda a las pymes para sustentar su liquidez y su solvencia lo que ahora es una crisis económica puede convertirse en una crisis financiera como pasó en 2011. Pero ahora puede ser mucho peor. Pueden desaparecer miles de empresas y empleos porque no van a poder aguantar». Esta es la advertencia que ha puesto sobre la mesa la patronal Cepyme durante la presentación de su informe «Efecto de la tercera ola en las pymes», cuyos datos advierten de una «situación límite» entre las pequeñas y medianas empresas.
La patronal advierte de los dos problemas principales que acucian en estos momentos a los empresarios: la falta de liquidez y el problema de la solvencia. Para intentar solventar esta situación –que está empeorando «gravemente» por las nuevas restricciones– ha planteado entre otras medidas, la condonación de préstamos ICO – que se ajustaría y sería como una ayuda inmediata en la liquidez de las empresas–, dar ayudas directas que supongan un importe del 20% de la pérdida de facturación de 2019, otorgar unas «vacaciones fiscales» cuando la pérdida de facturación sea superior a un 30% en comparación con los datos de 2020 –como recuerda el presidente de Cepyme, Gerardo Cuervas, «ya han hecho otros países de nuestro entorno»–. En el caso de pérdidas menores, Cepyme apuesta por aumentar los aplazamientos a la Seguridad Social y a Hacienda hasta en 24 meses sin garantías y reducir el recargo por retraso del 20% al 5%. También abogan porque se haga un pago inmediato de todas las deudas pendientes del conjunto de las administraciones públicas con las pymes.
Según defiende Cuervas, las pymes con problemas de liquidez necesitarían la ampliación del plazo de devolución y las cuantías de los préstamos ICO, el pago de ayudas directas en los límites que establece Europa o las citadas ventajas fiscales.
Para las empresas con riesgo de insolvencia reclaman que se pueda convertir en ayudas directas la condonación del pago préstamos ICO con los límites que establece la UE, así como diversas medidas para garantizar su supervivencia, como incentivos y ayudas fiscales para la fusión de microempresas o la aportación de recursos públicos en fondos mixtos destinados a la inversión en pymes, esto es habilitar préstamos participativos.
Para el presidente de Cepyme, la pyme necesita una «inyección de liquidez» y nuevas medidas «quirúrgicas» para evitar «una sangría» de cierres, y recordó que el Banco de España ha situado el porcentaje de las empresas insolventes a finales de 2020 entre el 14% y el 19%, pronosticando que hasta un 10% podría terminar siendo inviable. «Si el Gobierno no pone medidas, la curva se disparará», apostilló.
Según los datos aportados por
Hostelería, comercio, inmobiliarias, automoción y transporte terrestre son los sectores más perjudicados
el informe de Cepyme, las pequeñas y medianas empresas perderían 1.100 millones de euros a la semana y 300.000 empleos se verían afectados si hubiese un nuevo confinamiento o se recrudecieran exponencialmente las restricciones ordenadas por la Administración. Los niveles de facturación se hundirían de golpe un 14% –unos 1.800 millones cada siete días en todo tipo de empresas, con especial incidencia entre las pymes (esos citados 1.100 millones)–, y la pérdida de empleo se elevaría otro 9,4%, con unos 480.000 trabajadores afectados. En concreto, las pérdidas serían del 22% en el caso de las pequeñas empresas, del 22% en el caso de las micropymes y del 18% en el caso de las medianas.