Gilipolleces
debate absurdo que está generando la celebración de la Eurocopa 2021 en Bilbao. Bildu y Podemos compiten para ver quién dice la idiotez más grande y el argumento más necio. Los primeros, Bildu, se oponen dependiendo de si el evento es con o sin público. Si es con público la celebración de la Eurocopa la gana el País Vasco porque el impacto económico sería de 30 millones de euros, pero, si es sin público el evento lo ganaría España, porque sería la selección española la que se desplazaría a Bilbao y la que participaría en la Eurocopa. 30 millones inclinarían la balanza para que un evento tenga raíces identitarias vascas o españolas.
Pero en esta competición de idioteces, Podemos se alza con la victoria. Rechaza la celebración de la Eurocopa porque dice que es un evento masculinizado y, que de celebrarse, lo único que va a generar son problemas que es lo que sucede cuando la testosterona campa a sus anchas. Pues nada que ahora vamos a tener en cuenta en las ferias, eventos y congresos internacionales y mundiales el grado de testosterona de los organizadores, participantes y asistentes.
Si un dirigente político no entiende de la imagen, prestigio, ingresos, aportación al PIB y bienestar social que puede general un evento internacional, aunque sea una carrera de caracoles como dijo el portavoz socialista bilbaíno, que se vaya a su casa.
Esto no es una lucha por la igualdad, esto es un odio hacia el sexo masculino desmedido al que no le encuentro ninguna explicación. Pero claro es muy díficil, por no decir imposible, entender la gilipollez. Francisco Umbral decía que «el gilipollas por definición lo es de cuerpo entero». Se es gilipollas como se es pícnico, barbero, coronel, sastre, canónigo o notario: de una manera genérica y vocacional.