La Fiscalía avisa a Podemos de que no ha aclarado el «caso Neurona»
El juez investigó en secreto para que los implicados no manipularan las pruebas
La Fiscalía Provincial de Madrid ha advertido a Podemos de que casi siete meses después de haber iniciado su investigación sobre el contrato de 363.000 euros de la coalición política de izquierda con Neurona Consulting, la formación de Pablo Iglesias no ha sido capaz de explicar «qué trabajadores tuvo la consultora mexicana, cuánto tiempo trabajaron en España, si se desplazaron desde México y dónde se hospedaron», según consta en una nota de prensa, que destaca que toda esta información es de «fácil acceso» para el partido morado, pero que sin embargo «no ha sido facilitada».
Por ello, elministerio público pone de manifiesto que la investigación que ha realizado «no ha desvirtuado a día de hoy» el relato de la denuncia del ex coordinador jurídico de Podemos José Manuel Calvente y la documentación remitida por el Tribunal de Cuentas, en la que se apuntaban las irregularidades.
Por eso la Fiscalía de Madrid ha decidido apoyar la decisión del juez que investiga a Podemos, Juan José Escalonilla, quien en un auto de 16 de diciembre de 2020 había reclamado a la Junta Electoral Provincial de Madrid que informara sobre la identidad del administrador electoral designado por la coalición electoral Unidas PodemosIzquierda Unida en las Elecciones Autonómicas de la Comunidad de Madrid del 26 de mayo de 2019. «Así como la cuenta o cuentas electorales designadas para la recaudación de fondos», completa la nota difundida por el Ministerio Fiscal.
«El principal objeto de este procedimiento es determinar la realidad o no del contrato entre Podemos y Neurona indiciariamente constitutivo de delito electoral como se ha venido reiteradamente exponiendo a lo largo de este procedimiento», dice la Fiscalía, que prosigue: «Si lo que se investiga es la realidad del contrato y de la propia mercantil mercantil que parece vinculada con el partido, es razonable investigar todos los contratos entre Neurona y la formación Unidas Podemos».
«El hecho de que se hicieran pagos a una sociedad indiciariamente ficticia», prosigue la Fiscalía, «obliga a realizar una mínima investigación. Más aún, el resultado de esta investigación puede ser incluso en interés del ahora recurrente [Podemos] por cuanto podrían extraerse conclusiones en beneficio del mismo, tanto en relación a la existencia o no de Neurona como de los contratos firmados. Y a ello nada obsta el hecho de que las cuentas de las elecciones de 26 de mayo fueran auditadas por la Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid», finaliza el escrito.
Sin embargo, la Fiscalía madrileña ha apoyado la decisión del instructor de archivar sus pesquisas sobre las obras de la sede de Podemos al considerar que los testigos «han dado cumplida explicación de los motivos por los cuales existe el desfase entre el proyecto y la ejecución, desfase por otro lado frecuente en la ejecución de obras». El Ministerio Fiscal sostiene, en este caso, que no existe «ningún indicio» de la existencia de un delito de administración desleal.
No obstante, el escrito de la fiscal reconoce que las declaraciones de los testigos «ofrecen dudas respecto de cómo se produjo el procedimiento [de adjudicación]. Y no por el hecho frecuente, es verdad, de invitar a contratistas sino por cuanto alguno de ellos refiere que ni siquiera se presentó a la licitación», resalta.
Por su parte, el juez de Madrid que investiga la presunta financiación de Podemos, Juan José Escalonilla, ha acordado levantar el secreto de sumario sobre unas investigaciones que encargó el pasado 21 de septiembre, según consta en un auto de 5 de febrero.
En la resolución consta que el instructor tomó la decisión de mantener en secreto dichas pesquisas ya que «su resultado podría verse comprometido en el supuesto de que tuvieran conocimiento de su realización las partes personadas», en referencia a los investigados.
En la causa están imputados dirigentes de Podemos como el secretario de Comunicación, Juan Manuel del Olmo; el tesorero, Daniel de Frutos; y la gerente, Rocío Val. Otros implicados son el ex administrador de Neurona Elías Castejón, pero también el propio partido Podemos como persona jurídica.
El pasado 20 de enero la ex responsable de Cumplimiento Normativo de Podemos Mónica Carmona informó al juez que tras su cese y el despido del ex coordinador jurídico José Manuel Calvente «algunos miembros de Podemos» habían borrado mensajes de Telegram «que podrían comprometerles», lo que según su punto de vista era «un acto de destrucción de pruebas».
La fiscal, que pide el archivo de las pesquisas sobre la sede, reconoce que las declaraciones de los testigos ofrecen dudas