Londres pide a Dubái una prueba de vida de la princesa Latifa
El secuestro de la hija del poderoso jeque está ya en manos de Naciones Unidas
El Gobierno británico ha pedido una prueba de vida de la princesa Latifa, hija del emir de Dubai, después de que la BBC haya emitido unos videos donde la joven de 35 años denuncia que ha sido secuestrada por su padre, uno de los hombres más ricos del mundo. «Me tomaron como rehén y esta villa se convirtió en prisión. Temo por mi vida», recalca en una serie de grabaciones realizadas con un móvil. La princesa, que intentó escapar de su familia en 2018, ha estado enviando mensajes clandestinos a varios amigos donde cuenta que los comandos que abortaron su huida la drogaron para llevarla de regreso a Emiratos Emiratos Árabes Unidos. Desde entonces, Latifa denuncia que permanece aislada en un chalé, vigilada por dos mujeres policías dentro de la casa y cinco agentes más en el exterior. «Ni siquiera puedo salir a tomar aire fresco», asegura. Sus amigos más cercanos reconocen que llevan siete meses sin tener contacto con ella.
El responsable de la diplomacia británica, Dominic Raab, recalcó ayer que las imágenes son «extremadamente perturbadoras. Se puede ver a una joven profundamente consternada», matizó. «Dado lo que acabamos de ver, creo que a nivel humano la gente quiere saber si está viva y bien», explicó cuando se le preguntó si apoyaría una solicitud a los Emila ratos para obtener pruebas de que la princesa Latifa está viva. El ministro asegura que Reino Unido está preocupado por este vídeo y Naciones Unidas está estudiando la cuestión. El primer ministro Boris Johnson también se mostró ayer preocupado por la situación de la princesa.
El emir de Dubái, el jeque Mohamed Bin Rashid al Maktum, es vicepresidente y primer ministro emiratí. En los últimos años se ha apoyado en el éxito de su ciudadEstado para proyectarse como el líder más liberal y con mayor visión de futuro del mundo árabe. Pero su situación familiar –tiene una veintena de hijos de diferentes esposas– revela otra realidad completamente diferente. La princesa Latifa ya había llamado
atención de la comunidad internacional en el año 2018, cuando un grupo de derechos humanos publicó un vídeo que ella grabó, en el que describe su intento de huir de Dubái. En marzo del año pasado, un juez de la Corte Suprema de Londres reconoció como fundadas una serie de acusaciones formuladas por la princesa Haya, ex esposa del emir de Dubái, quien alegó en particular que el emir había ordenado el secuestro de la princesa Latifa. Los abogados de este último desestimaron los cargos.