El AVE llegará a la T-4 de Barajas en 2024 El ministerio calcula que la conexión directa de la alta velocidad no llegará al menos hasta el año 2030
Transportes licitará el año que viene las obras para que la alta velocidad use en una primera fase la actual línea de Cercanías
El gestor de infraestructuras ferroviarias, Adif, pondrá en marcha en 2022 los trabajos para llevar el AVE a la T-4 del aeropuerto de Barajas. Así lo anunció ayer el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos. Durante su visita a la Feria Internacional del Turismo, Fitur, el ministro explicó que la llegada de la alta velocidad a Barajas se producirá en dos fases: en el «corto/medio plazo» se harán los trabajos para que «algunos servicios» de AVE puedan prolongarse desde Chamartín a Barajas por la actual línea de Cercanías de Renfe. Al respecto, los técnicos están trabajando ya para implantar trenes bitensión y Adif está ya desarrollando los proyectos para poder licitar las obras necesarias en 2022. Transportes prevé que el servicio esté disponible en 2024 o 2025.
Para la segunda fase, Transportes está planificando una conexión específica de alta velocidad a Barajas. El ministerio asegura que sus resultados preliminares de demanda y rentabilidad socioeconómica concluidos «animan a seguir con la siguiente fase de los estudios». estudios». Por ello, el departamento va a seguir adelante en la siguiente fase de redacción del estudio informativo. Esta conexión específica para el AVE, más compleja y que partiría de cero, no estaría lista al menos hasta el año 2030, según las estimaciones ministeriales.
La llegada de la alta velocidad a Barajas era una de las principales demandas de las aerolíneas españolas, particularmente de Iberia, para permitir una mejor conectividad y hacer del aeropuerto madrileño un «hub» de referencia como es el caso de otros aeródromos europeos como París o Fráncfort. Fráncfort. Iberia calcula que la conexión podría aportar entre 300.000 y 400.000 viajeros extra al aeródromo madrileño. Se trata de viajeros en conexiónde ciudades españolas que, ahora mismo, para hacer viajes de largo radio, optan en muchos casos por combinaciones aéreas que les llevan a otros aeropuertos europeos. Con la llegada del AVE a Barajas, se espera que estos pasajeros se decanten por el aeropuerto madrileño al suponer el tren una opción mucho más cómoda que enlazar dos vuelos.
Iberia también mantiene en activo rutas nacionales para alimentar sus vuelos de largo radio y evitar esa fuga de viajeros a otros aeropuertos. Sin embargo, muchas de ellas son deficitarias, por lo que la conexión a través de alta velocidad le permitiría prescindir de ellas, lo que redundaría en una mejora importante de su cuenta de resultados.
Amenaza al corto radio
La llegada de la alta velocidad a Barajas no es la única amenaza que se cierne sobre los vuelos de corto radio. La Agenda 2050 presentada ayer por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recomiendo seguir los pasos de Francia y prohibir los vuelos de trayectos que se puedan hacer en tren en menos de dos horas y media. El plan también contempla disminuir el impacto medioambiental del transporte aéreo mediante la introducción de la tasa de viajero frecuente o el establecimiento de impuestos sobre los billetes de avión según la cercanía del destino.
Las aerolíneas calculan que la llegada de estos trenes pueden aportar hasta 400.000 pasajeros al «hub» aeroportuario