Los expertos avisan de las «tácticas de guerra híbrida» de Marruecos
«Es un conflicto de baja intensidad que se prolongará durante mucho tiempo», alertan
Un grupo de expertos alertó ayer de que la reciente avalancha de inmigrantes llegados a Ceuta, con la permisividad de las autoridades marroquíes, es «una acción más dentro del marco de conflictividad territorial que plantea y desarrolla Marruecos respecto a la soberanía española de determinados territorios». Y avisaron de que el Reino alauí «utiliza tácticas de guerra híbrida contra España», desbordando «los límites de los aceptable a la hora de promover sus intereses».
Es el resumen del webinar que organizó ayer el Instituto de Seguridad y Cultura, en el que participaron Manuel R. Torres Soriano, catedrático de la Universidad Pablo de Olavide (UPO); Guillem Colom Piella, profesor de la UPO y autor del informe «Marruecos, el Estrecho de Gibraltar y la amenaza militar sobre España»; y Carlos Echeverría Jesús, director del Observatorio de Ceuta y Melilla.
Según Torres, las acciones de Marruecos cumplen con lo que sería «guerra híbrida», entre otros porque no le preocupa «comprometer la seguridad y el bienestar de otro país» para lograr sus objetivos. De hecho, tiene claro que lleva tiempo «promoviendo un tipo de conflicto de baja intensidad» que «probablemente se prolongue mucho en el tiempo», incluyendo periodos de «relajación» y «de aceleración cuando el agreterior» sor considere que se abren nuevas ventanas de oportunidad».
Y una de esas «ventanas» para mostrarse fuerte sería la presencia en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. Pero, sobre todo, «el reconocimiento de Estados Unidos a las aspiraciones marroquíes sobre el Sáhara», lo que le ha dado alas, tal y como explicó Colom. «Marruecos entiende que debe aprovechar la coyuntura para doblegar la postura de algunos países europeos respecto al Sáhara», añadió.
En este sentido, señaló que acciones como la de enviar a miles de inmigrantes a Ceuta «no se toman en vacío, existe un contexto y un modus operandi». De ahí que pueda considerarse como «represalia a la acogida de Ghali» o como «una acción más» dentro de sus reclamaciones sobre los territorios españoles.
«Ceuta y Melilla son asuntos muy candentes en la mentalidad e historia de Marruecos», destacó Colom, recalcando que «el deber de todo Sultán de Marruecos siempre fue hacer la yihad contra los enclaves españoles».
En este sentido, Echeverría hizo hincapié en el «error que comete Marruecos», pues «reivindicar Ceuta o Melilla es como reivindicar Valencia o Lugo». En su opinión, «Marruecos pretende desviar su fracaso en política interior con estas acciones de política exy exy «no ha dudado en agredir las fronteras de la UE». Es «otra violación más del derecho internacional».
«Marruecos es una dictadura que ha invadido el Sáhara y ahora pretende hacer lo mismo con Ceuta y Melilla», dijo Echeverría para dejar claro que estamos ante «un régimen que no ha dudado en engañar a sus población difundiendo ideas falsas como que Ceuta y Melilla son marroquíes» y que «antepone sus intereses políticos a las vidas de sus ciudadanos, incluidos miles de menores».
Ante este escenario, los expertos consideran que la reacción «debe de ir de la mano de mantener una postura firme» y «seguir profundizando en la disuasión de carácter militar».
«Marruecos antepone sus intereses políticos a las vidas de sus ciudadanos, incluidos miles de menores», apuntan