postgrados PARA UN FUTURO DE EMPLEO
La Universidad Pontificia Comillas apuesta por la innovación para preparar a sus estudiantes para el mundo laboral
LaLa tecnología que ya impregna toda nuestra vida debe estar presente de manera transversal en la universidad para formar a profesionales que desempeñarán labores tecnologizadas hoy desconocidas. Desde ingenieros a abogados, incluso en estudios de Humanidades. La Universidad Pontificia Comillas e ICADE Business School son un claro ejemplo de ello.
La situación de pandemia que se mantiene en España desde hace más de un año ha provocado que la incertidumbre se haya convertido en algo habitual. Por eso, la búsqueda de certidumbres se hace cada vez más necesaria. En el caso de la educación superior y los postgrados, éstas aparecen con la solidez de las instituciones; con la trayectoria histórica; con la innovación docente y con su capacidad de empleabilidad, que son la mejor apuesta para formarse para un futuro que se ha acelerado con la pandemia y para unos empleos que requerirán nuevos perfiles y habilidades.
«Elegir un postgrado en una universidad o escuela de negocios con una trayectoria de éxito educativo y con una relación estrecha con la sociedad, por un lado, y con el mundo empresarial por otro, es una garantía de éxito para el futuro profesional de los estudiantes», asegura Antonio Obregón, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la Universidad Pontificia Comillas. Esta es una universidad paradigmática ya que una sola institución aúna la tradición de más de cien años de historia y la innovación educativa que necesita una universidad para conseguir que sus graduados salgan al mercado con la mejor preparación. Comillas fue la primera universidad en España en implantar los dobles grados y no deja de innovar cada curso: el que viene iniciarán su trayectoria el Grado de Ingeniería Matemática e Inteligencia Artificial en Comillas ICAI –pionero en España por relacionar ambas disciplinas–, y el doble grado de Psicología y Administración de Empresas, transversal a Comillas ICADE y Comillas CIHS, la parte de Humanidades de la universidad.
La importancia de lo «tech»
La transversalidad es una de las características de una educación de calidad. En el caso de la universidad jesuita de Madrid redunda en una formación integral, a cuya receta se añade una buena pizca de internacionalización y otra de profesionalización que no solo se da en los grados, sino también en los postgrados. No en vano, ICADE Business School –la escuela de negocios de la Universidad Pontificia Comillas– destaca por ser una de las más reconocidas en España gracias a sus más de 600 convenios internacionales con universidades y escuelas de negocio de todo el mundo. También a que pertenece a la red más extensa de universidades de todo el mundo y a que más del 95% de quienes acaban sus estudios allí está ocupados a los seis meses.
El hecho de que la Universidad Pontificia Comillas tenga una escuela de ingeniería, Comillas ICAI, hace que todo se impregne de tecnología. Allí ya se han consolidado postgrados como los de Big Data, Ciberseguridad, Seguridad y Movilidad o Smart Grids, que apuntan a una decidida apuesta por la transformación digital y ofrecer a empresas profesionales muy cualificados. «El añadir elementos novedosos relacionados con la digitalización y la investigación en diferentes facetas tecnológicas hace que los postgrados de ICADE Business School y de la universidad tengan ese elemento diferenciador diferenciador que tanto necesitan las empresas y que tanto nos demandan», asegura Virginia Horcajadas, subdirectora de la escuela de negocios de Comillas. Un ejemplo de ello es el MBA Tech y el Máster de Acceso a la Abogacía con Legal Tech.
La tecnología está en cualquier parte, también en los másteres en Biomecánica y Fisioterapia Deportiva, y Cuidados Paliativos, de la Escuela de Enfermería y Fisioterapia «San Juan de Dios», adscrita a Comillas. Y también en el sector legal. Antonio Alonso Timón, director del Centro de Innovación del Derecho (CID-ICADE), subraya que «con un programa como el nuestro, en el que participan observatorios y cátedras de la universidad lideradas por las más importantes firmas legales en España, enseñamos a ser buen abogado y jurista en un mundo tecnologizado. Un buen abogado debe saber usar determinadas herramientas tecnológicas y asesorar a empresas digitalizadas». Alonso Timón, además, revela que «conocer el contexto digital de la empresa y la digitalización del propio despacho permite que el abogado se forme para un mundo cambiante».