El SEPE, a punto de perder 1.500 interinos pese a su caos
Función Pública debe decidir y solo asegura su continuidad a 635
Con la mosca detrás de la oreja. Así se encuentran los interinos del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) contratados a consecuencia de la pandemia. Apenas faltan 26 días para el fin de sus contratos, pero siguen sin tener asegurada su continuidad. Son un total de 1.500 efectivos incorporados para paliar el sobretrabajo por causas directas del coronavirus y otros 635 trabajadores adscritos a los sucesivos programas extraordinarios, cuyos nombramientos en ambos casos concluyen el último día del mes junio.
A lo largo de día de ayer, los Ministerios de Trabajo y Función Pública lanzaron mensajes contradictorios sobre esta cuestión. Mientras que el que dirige Yolanda Díaz aseguraba que la petición de renovación se había hecho para el total de los 2.135 contratados temporales, desde Función Pública la confirmación era tan solo parcial, ya que su Dirección General estaría barajando no renovar a los
1.500 temporales incorporados para apoyar servicios administrativos relacionados con la pandemia al ser puestos de creación extraordinaria para un cometido concreto.
Para el resto, los 635 que ocupan de manera interina plazas enmarcadas en el Plan de Estabilización del Empleo Temporal en la Administración General del Estado, su renovación hasta el 30 de septiembre ya habría sido confirmada al estar sus puestos adscritos a la oferta de empleo publicada en el BOE del 28 de mayo, pero no se hará pública hasta que se tome una decisión sobre el conjunto de trabajadores temporales.
La Dirección General de Función Pública (DGFP) se lo está tomando con calma, pese a la premura de fechas. «Se está trabajando para su renovación, pero todavía hay tiempo hasta el 30 de junio. En cuanto haya una decisión se comunicará. Pero todavía no podemos concretar de manera definitiva su continuidad», explicaron a LA RAZÓN fuentes de este Ministerio.
Este último matiz confirmaría los temores sobre que una parte de estos trabajadores públicos no serán renovados, concretamente los 1.500 que ocupan esas plazas de manera temporal y extraordinaria. La Dirección General no tiene clara la continuidad de este 17% de la actual plantilla del SEPE. Las últimas declaraciones públicas de varios ministros –como la propia Díaz– sobre la mejora de la economía y el continuo descenso de trabajadores en paro o en ERTE, han hecho dudar a la DGFP sobre la verdadera necesidad de renovación de todos estos interinos. «Si hay menos carga administrativa, evidentemente la necesidad de personal también será menor», deslizaron otras fuentes ministeriales.
El 17% de la actual plantilla del organismo no se renovaría aduciendo menos carga de trabajo por la bajada del paro
Sin embargo, desde la central sindical CSIF insisten en la imperiosa necesidad de mantener a estos trabajadores temporales «porque a pesar de lo que se pueda manifestar desde el Ejecutivo, la carga de trabajo que gestiona la plantilla del SEPE sigue siendo extraordinariamente elevada y caso de no prorrogar sus nombramientos temporales, se podría comprometer la operatividad de todo el servicio este verano, cuando la plantilla fija inicie sus merecidísimos periodos vacacionales». También advierten que muchas unidades se quedarían prácticamente bloqueadas en buena parte de provincias, ya que la escasez de personal fijo en algunas de ellas, pese a los refuerzos, «sigue siendo un problema endémico en el SEPE que empeorará sin esta renovación».