IA, el revulsivo que la industria de los smartphones espera
► Más allá de nuevos formatos y experimentos con pantallas plegables, la IA puede transformar la funcionalidad de los teléfonos móviles
La inteligencia artificial se nutre de datos. Y si hay algo que tenga (casi) todos los datos de la vida de cualquier usuario es su teléfono móvil: correo, aplicaciones de mensajería, contactos, mapas, bancos, registros sanitarios, documentación oficial, fotos, música, libros, películas, lugares de visita, de compra… Además, estos terminales registran cada paso físico (y virtual) que damos y con la popularización de los wereables, también tienen acceso a nuestras constantes vitales para comprobar cómo cambian según qué rutinas, lugares que visitamos o actividades que realizamos.
Juntar, procesar y analizar toda esta información puede cambiar radicalmente la manera en que usamos en estos momentos los teléfonos móviles. Gracias a la inteligencia artificial, estos dispositivos pasarían a ser unos verdaderos asistentes personales de cada uno de nosotros, adelantándose incluso a las propias necesidades. Por ejemplo, si en el calendario tenemos marcada una reunión importante pero ha habido un accidente en una carretera, por lo que el tránsito hacia esta reunión puede ser de mayor tiempo de duración, el teléfono sería lo suficientemente inteligente para adelantar la hora del despertador y evitar que llegásemos tarde a esta cita, además de sugerirnos las rutas alternativas más idóneas y enviar un mensaje de pre aviso a los asistentes por si finalmente nos demoramos.
Fotos y más
Algunas prestaciones de la IA en los móviles ya las estamos viendo. Por ejemplo, Google presume de que sus smartphones Pixel 8 y Pixel 8 Pro incorporan funciones de IA para, por ejemplo, recibir menos llamadas comerciales no deseadas, responder en segundo plano a las llamadas de números desconocidos (con una voz más natural, para facilitar la interacción con la persona que llama) y avanza que ofrecerá respuestas contextuales, para que se pueda responder con un solo toque a llamadas sencillas, como confirmaciones de citas, sin necesidad de coger
Además, en el propio sistema operativo que desarrolla (Android) y que ofrece a los fabricantes de terminales ya se incorporan funcionalidades como Android Auto para resumir textos largos o grupos de chat, sugerir respuestas y acciones relevantes, para que con un solo toque se puedan gestionar o incluir descripciones de imágenes. Son algunos primeros usos que avanzan por dónde irá el futuro desarrollo.
Según algunos analistas, la capacidad de los teléfonos para generalizar y determinar lo que podría ocurrir a continuación basándose en patrones y conjuntos de datos de uso anteriores se está convirtiendo en una « parte esencial» de la experiencia de los usuarios. Por hacernos una idea, si en 2017 los microprocesadores especializados que permiten que estos terminales saquen partidode la IA solo estaban presentes en el 3% de los smartphones, en 2020, más de un tercio de los tres mil millones de teléfonos inteligentes del mundo que se vendieron ya estaban equipados con procesadores que realizaban billones de operaciones rápidamente y con menos energía.
La IA hoy
Otro de los cambios a los que estamos asistiendo está precisamente en la parte hardware.
La inteligencia artificial (IA) está presente en los teléfonos móviles desde hace algún tiempo, pero en la generación anterior de teléfonos estaba basada en la nube y requería que estuvieran conecta
► Los datos de la venta de teléfonos móviles en España a los que ha tenido acceso esta redacción ponen de manifiesto que, al igual que ha ocurrido en otros países de nuestro entorno, nuestro mercado se inclina cada vez más por los teléfonos de gama alta, lo que también conlleva que su reemplazo se produzca cada más tiempo y, por tanto, que se acaben vendiendo menos unidades.
Según estos datos de IDC, Apple es el fabricante que más dinero mueve y gana con la venta de smartphones, pese a no liderar el negocio por unidades vendidas. Fuentes de la consultora explican a esta redacción que el soporte continuo que Apple da a sus dispositivos, independientemente de los años que tenga, hace que muchos usuarios se estén decantando por adquirir estos terminales, puesto que pese a su mayor precio saben que seguirán operativos pasados incluso cinco años. Algo que, dicen, no ocurre con Android.
Tener más mercado o ganar más dinero