Mas mantiene la tensión institucional con Rajoy en el sprint hacia el 24-M
El Govern presume de la proyección internacional que coge el proceso catalán
La presión institucional entre los gobiernos catalán y español se mantiene intacta a pesar de la campaña electoral. Es más, en algunos aspectos incluso se ha acrecentado. En el de la lengua, por ejemplo, o en el policial. En todos, en cualquier caso, con el proceso soberanista como permanente telón de fondo. En este escenario, y en pleno sprint hacia el 24-M, el equipo de Artur Mas mantuvo ayer inalterables sus posiciones frente a las del gabinete de Mariano Rajoy, como si de la respuesta del presidente catalán a las invectivas que veinticuatro horas le había dirigido el presidente español, en un mitin del PP en Barcelona, se tratara.
En el frente policial, el presidente de la Generalitat ha comunicado al Gobierno español su intención de convocar una reunión de la Junta de Seguretat de Catalunya –que se comprometió a desencallar en un reciente pleno en el Parlament–, en un momento de máxima polémica entre las dos administraciones a raíz del presunto soplo de la policía española a yihadistas que vigilaban los Mossos d’Esquadra. Una reunión, que en todo caso se celebraría después del 24-M, que debería servir para rebajar justamente esta tensión, según explicó el conseller de Presidència, Francesc Homs, al término de la reunión del Govern. “Nosotros trabajaremos para ello”, garantizó, mientras reprochaba la actitud del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en este caso: “Convendría un punto más de serenidad por parte del ministro español, y si es así seguro que la reunión será productiva”.
En el frente político, el gabinete de Artur Mas sacó pecho por la declaración aprobada ayer mismo por el pleno del Parlamento de Dinamarca de apoyo a un “diálogo democrático y pacífico” entre los gobiernos español y catalán para dar sa0lida a la demanda soberanista de Catalunya. Una declaración, aprobada por 64 votos a favor, ninguno en contra y 41 abstenciones –“ni un solo voto en contra, señor Margallo”, espetó Francesc Homs–, que es la evidencia, según el portavoz del Govern, de “la proyección internacional que está cogiendo la cuestión catalana”. La circunstancia fue aprovechada, además, por el conseller de Pre- sidència para denunciar una campaña de presión en el exterior contra el proceso catalán por parte del Gobierno español que le lleva a “hacer cosas extrañas” y a “realizar acciones que lo son todo menos diplomáticas”. “Supongo que el debate danés les debe escocer mucho, ellos que afirman que el proceso soberanista catalán es un tema interno que no interesa a nadie”, sostuvo Francesc Homs, que recetó al
Homs celebra el apoyo del Parlamento danés: “Ni un solo voto en contra, señor Margallo” El president pide reunir la Junta de Seguretat para rebajar presión entre gabinetes El Govern afea al PP el trato a activistas de la PAH: “No es manera de enfocar las cosas”
ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, la misma medicina que había prescrito a su homólogo del Interior: “Un punto más de serenidad” .
Todavía en el frente político, el portavoz del Govern manifestó su respeto por los ayuntamientos que mantienen las banderas estelades a pesar de la prohibición de la Junta Electoral Central. Y censuró los golpes que recibieron los activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) que irrumpieron en el mitin del lunes de Mariano Rajoy en Barcelona. “No es manera de enfocar las cosas”, lamentó Francesc Homs, que remarcó al PP que “se tienen que respetar todas las expresiones, aunque no nos gusten, siempre que sean pacíficas y democráticas”.