Antony & lo sinfónico
Maricel Chavarría Hay un entendimiento tácito entre el sonido sinfónico y la presencia vocal de Antony, con esa, su sensibilidad mesiánica. Es un maridaje que viene de lejos, con la London Symphony en el 2008 o grabando ese Cut the world con la Orquesta Nacional de Dinamarca, en Copenhague, un álbum que pondría en manos de otras orquestas en directo, como la jazzy Metropole en Amsterdam. Antony Hegarty, british composer (se agradece no te- ner que usar el masculino compositor), poeta, artista visual e indescriptible cantante de la banda Antony and the Johnsons, puso la guinda a ese proyecto/tournée anoche, y dejando su duende en el escenario Heineken del Fòrum. Le acompañaba la OBC, no podía ser de otro modo, la orquesta de la ciudad, ávida de abrirse a otros géneros y acercar la música sinfónica a la gente joven. El Primavera Sound pensó en ella ipso facto... se necesitaban 40 músicos para acompañar a Antony. “Pero mamá, ¿tocar con Antony? ¡Qué pasada!”. Los sosos músicos de la clásica tenían su momento cool de gloria.
Se pidieron voluntarios, pues se trataba de combinar ese proyecto con el programa de la semana en L’Auditori. Pero por muy exigente que sea la 9.ª de Mahler, la experiencia valía la pena. Los músicos que eran fans del artista, como la viola estadounidense Jennifer Stahl –12 años con la OBC ya– no podían esperar a conocerle. “¡Me encanta su voz, tan especial. Y los arreglos de Rob Moose, que además nos dirige, tienen ese fantástico toque minimalista”, comentaba en el tranvía camino del Fòrum. El percusionista Ignasi Vila no sabía de Antony, pero se apuntó también –“me gusta hacer cosas distintas, ya nos pasamos la temporada ente- ra haciendo clásica”– y buscó rápidamente en Youtube. “Lo encuentro un estilo extraño –opina–, con ese registro agudo de voz y ese tempo que parece que no tocas tierra”. “No, yo tampoco le conocía, supongo que debería avergonzarme”, ríe la viola Christine de Lacoste, fran- cesa, 25 años en Barcelona. Sus hijos de 16 y 17 alucinaban con la idea de verla en el Fòrum.
Porque la del Heineken iba a ser una noche hiriente, en el buen sentido. Cálida por dentro y fría por fuera. “Gosht, leap from my heart and find your way...”, cantaba Antony enfundado en una túnica al poco de comenzar el concierto, pasadas las diez. Y se diría que los fantasmas que corrían por el Fòrum huían literalmente hacia el mar, en sentido ascendente. Sonarían luego temas del álbum Cut the World, como el agradecido Cripple and the Starfish, o Swanlighst. Y el cojín minimalista de cuerdas de los arreglos orquestales en Another World justificarían por entero la velada, como los vientos en el tema que lleva el nombre del álbum... que conseguirían que con los fantasmas del Fòrum se evaporara también la imagen que permanece en la mente de todos cuando suena la pieza: Willem Dafoe siendo degollado por el alter ego de Marina Abramovic frente a un ventanal de Manhattan, según el clip de Nabil. ¡Buf, artistas!
En estos tres o cuatro años con su proyecto sinfónico, Antony ha introducido cambios. A veces incluso su brutal versión de Crazy in love de Beyoncé... convirtiéndola en una dolorida balada, ja ja. Pero no fue el caso ayer. El gigantesco escenario se presta a ideas más conceptuales. Imágenes de sus happenings artísticos, un butho buñueliano siempre sugerente. En lo musical, hubo sus dosis de existencialismo transgénero: I felt in love with a dead boy, por ejemplo, en la que Antony canta “Should I call a doctor...” antes de dejar la música en suspense y confesarse in love de un bello cadáver... “Oh, such a beautiful boy. I’m asking. Are you a boy or a girl”. Y el Fòrum se viene abajo.
Le siguen Dust & Water, un tema que escribió en una etapa de miedo a la piedras... ¿y si resulta que no tienen alma?, pensaba, víctima del celo católico que concede ese privilegio únicamente a los humanos. Y suena también Salt Silver Oxigen, que ha escrito durante esta gira, seguido de You are my sister.
Yes, we are, desde luego.
El cojín minimalista de cuerdas de la OBC en ‘Another World’ ya justificaba la velada con el líder de los Johnsons