La Generalitat compra 40 pisos a través del derecho de tanteo y retracto
La Generalitat ha comprado los primeros 40 pisos a través del derecho de tanteo y retracto desde que se aprobó el pasado mes de marzo el decreto de medidas urgentes en materia de vivienda. Ayer se formalizó ante notario la compra de estas residencias, 18 de ellas ocupadas y que se encuentran en Salt, l’Hospitalet, Badalona, Terrassa, Mataró y Rubí. Todas ellas proceden de ejecuciones hipotecarias que Bankia tenía intención de vender. Los 18 pisos que están ocupados se mantendrá bajo la protección de la Generalitat con un alquiler social, según informó ayer la conselleria.
En esta adquisición se han invertido 864.565 euros. El piso más caro se ha comprado por 33.000 en Terrassa, mientras que los más baratos están, en su mayoría, en Salt y tiene un precio de 17.500 euros. El coste medio de estas residencias se ha situado entre los 22.500 y 25.000 euros. El conseller de Territori i Sostenibilitat, Sant Vila, explicó que el derecho de tanteo y retracto es una medida instrumental que empieza a dar sus frutos. En este sentido, dijo que “este julio se comprarán 40 viviendas más” a través de este mismo sistema.
Esta iniciativa, que se está aplicando en 72 municipios con de- manda acreditada, implica que en las operaciones de compra de viviendas procedentes de ejecuciones hipotecarias las entidades bancarias tengan que informar de dicha venta a la Generalitat. De esta manera, el Govern tiene preferencia, conjuntamente con los municipios, para comprar el piso al mismo precio y destinarlo al mercado de alquiler social.
Este 2015 se ha destinado una partida presupuestaria de ocho millones de euros, a la que se deberá sumar los ingresos procedentes del futuro impuesto sobre viviendas vacías que deberán pagar las entidades bancarias. Esta misma semana está previsto que el Parlament apruebe definitiva- mente la ley que crea este impuesto. El objetivo marcado por el departamento de Vila es la compra de 1.420 pisos a través del tanteo y retracto entre 2015 y 2016. De esta manera, según el conseller, se podrá incrementar el parque de vivienda pública en un 10%.
En Catalunya, el año pasado se produjeron un total de 14.230 ejecuciones hipotecarias, de las que 10.635 fueron viviendas en propiedad de personas físicas y 3.595, de personas jurídicas. Del total de pisos procedentes de ejecuciones hipotecarias, la gran mayoría son usados, un total de 12.878, y tan sólo 1.352 son nuevos.