Purito, como en su casa
Victoria sensacional del ciclista de Parets, que domina a Froome y a todos en Huy
La traía marcada desde su refugio de Andorra. El muro de Huy era su primera gran oportunidad de lucirse, un final idóneo para sus características, donde conquistó la Flecha Valona en el año 2012 y donde también había acabado segundo dos veces. Joaquim Rodríguez, Purito, no podía desperdiciar esta oportunidad soñada, y no lo hizo. Ni un excepcional Chris Froome, nuevo líder de la carrera, ni el marcaje de Alberto Contador, que flojeó en los últimos 350 metros, ni la presencia de un especialista temible, como Alejandro Valverde. Ni la caída del día antes que lo tenía preocupado. Nada. El muro de Huy es como su casa y Purito, 36 años, cuarta participación en el Tour de Francia, lanzó su golpe mortífero a poco menos de medio kilómetro del final y se largó con decisión hacia la gloria. Segunda etapa del Tour en su historial (ya venció en Mende en 2010), novena victoria catalana en 102 ediciones del Tour de Francia, a la caza de las tres de Miquel Poblet y por delante ya de los que tienen una: Mariano Cañardo, José Pérez Francés, Pedro Torres y Juan Antonio Flecha. Campeones de leyenda que tocaron el cielo del Tour y entraron en la lista reservada a los campeones, a los más sacrificados y a los más valientes. Como este deportista menudo de Parets del Vallès que conquista a todo el mundo con la sonrisa y es capaz de dominar a los rivales con la chispa de sus piernas.
La victoria de Joaquim Rodrí- guez fue la culminación de una etapa afectada por unas caídas que provocaron cuatro abandonos y un montón de contusionados. Fueron dos accidentes casi consecutivos con tantos implicados que el Tour se quedó sin ambulancias y por precaución decidió detener la carrera unos minutos. En la parte final, cuando tocaba jugarse la vic- toria, el Tinkoff de Contador endureció la carrera, aunque también el Sky y Froome aparecían en las posiciones punteras. El paso por el alto previo a Huy hizo añicos el grupo y la tensión creciente anunciaba la batalla final, la del camino de las capillas de Huy. A unos 450 metros del final Froome iba por delante con Contador a rueda y Purito en tercera posición. Fue el momento del cambio de ritmo letal del líder del Katusha, el que dejó clavado a Contador. Froome resistió a rueda del catalán y consiguió una segunda plaza que lo sitúa ahora como nuevo líder del Tour, pero Contador, en cambio, se quedó clavado y en los 350 metros finales perdió 18 segundos. Incluso lo superaron rivales como Van Garderen, Nibali, Quintana y Valverde. “El final se me ha hecho muy duro”, reconoció. “Pero todavía hay mucho camino por delante. ¿Froome? Lo hemos visto muy fuerte... todo el mundo está muy fuerte”.
El ciclista británico dijo que se sentía “muy sorprendido”. “He hecho lo que he podido para seguir a Purito, que ha tenido una actuación enorme. Y cuando he mirado atrás nadie nos seguía”. Froome cree que todavía es pronto para proclamarlo el hombre más fuerte de este Tour.